No ha sido una sorpresa, pero sí un jarro de agua fría para el mercado laboral malagueño. Es habitual que el número de parados crezca en el mes de agosto por la finalización de contratos para los dos meses fuertes del verano en el sector turístico y este fenómeno se ha vuelto a producir no solo en Málaga, sino en toda España. Se pone fin a una racha de seis meses de bajada consecutiva del desempleo en la provincia que ha permitido que se esté en niveles prepandémicos.

Durante este pasado mes de agosto las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo en Málaga han registrado 1.562 parados más, lo que supone un crecimiento del 1,1% respecto a julio. Ahora hay 136.399 personas que buscan un puesto de trabajo en la provincia, casi 10.000 menos que hace un año. 

El sector servicios, básicamente todo lo relacionado con el turismo como la hotelería, la hostelería o el comercio, es el motor de la economía malagueña y el que marca el ritmo de la economía local. Para bien y para mal. Tras unos meses de continuada caída del paro, toca cuesta arriba en la montaña rusa del empleo y el sector servicios ha registrado 1.335 parados más. También ha habido incrementos en la construcción (331) y en la industria (174), mientras que se ha contabilizado una ligera disminución en 179 personas en la agricultura y de 99 en el colectivo de personas que no tenían un empleo anterior. 

El paro se ha incrementado en 40.428 personas en toda España y Málaga ha estado en un nivel medio-bajo. De hecho, está bastante lejos de los 6.481 desempleados más registrados en Barcelona, los 3.254 de Madrid, los 3.677 de Valencia o los 3.186 de Sevilla. 

Menos afiliados y menos contratos

Sube el desempleo y cae el número de afiliados a la Seguridad Social casi en la misma proporción (1.844 cotizantes menos en la provincia en agosto respecto a julio) aunque sigue en volúmenes históricos con 684.840 personas dadas de alta en Málaga. Son casi 40.000 más que hace un año. 

Aunque septiembre es también un buen mes para la temporada turística en la Costa del Sol, los meses más gordos son julio y agosto y eso se ve reflejado en la contratación. El mes pasado se firmaron 15.000 contratos menos que en julio, un descenso del 22%, afectando más a los indefinidos (-28%) que a los temporales (17%). 

La reforma laboral puesta en marcha este año ha impulsado de forma notable la contratación indefinida, aunque el contrato temporal sigue siendo protagonista en la provincia malagueña. Entre enero y agosto se han suscrito 486.872 contratos en Málaga, de los cuales 301.049 han sido temporales (62%) y 185.823 indefinidos (38%). La temporalidad sigue ganando por goleada, aunque también es cierto que antes la reforma laboral el 95% de los acuerdos laborales eran temporales y se ha conseguido reducir hasta ese 60%.