El sol no brilló en prácticamente ningún momento de la jornada y el viento sopló fuerte. De hecho, Aemet activó la alerta amarilla por fenómenos costeros en todo el litoral malagueño. Sin embargo, el sábado de disfraces se disfrutó muchísimo en el Centro de Málaga. Grandes y pequeños abarrotaron las calles para aprovechar al máximo los últimos coletazos de la fiesta del invierno cálido, que finalizará este domingo con el entierro del boquerón en La Malagueta.

Desde las 12 de la mañana ya hubo eventos en la plaza de la Constitución, como concursos de disfraces y dibujos infantil. En el primero se vieron disfraces repletos de originalidad, como un padre que, con sus hijos, se convirtieron en paquetes de palomitas. Así, durante toda la jornada, varias agrupaciones que formaron parte del COAC del Carnaval de Málaga, así como callejeras como La España Vaciada o Los de Here Here.

Una imagen de la Batalla de las Flores. Ayuntamiento de Málaga

Sin embargo, cuando se armó realmente la fiesta fue cuando llegó la noche con la siempre esperada Batalla de las Flores. Sobre las siete de la tarde ya no cabía ni un alfiler en una calle Larios hasta los topes. Cada año, este evento levanta más pasiones. Sobre todo, entre aquellos que lo viven de cerca. Una vez que lo disfrutan... Ya siempre repiten.

Para el que no lo conozca, el funcionamiento es sencillo. Los miembros de las agrupaciones del COAC, así como algunos grupos de animación, dan vueltas por un recorrido establecido en Larios en toda una guerra de papelillos y serpentinas, así como pétalos de flores. Divertido es un rato, pero después en casa se pasa bastante regular limpiando los restos que se quedan en la ropa. 

En cualquier caso, merece la pena. Uno desfoga y se ríe con familia y amigos. ¿Qué más se puede pedir? Además, a las 21.00 horas comenzó la gala drag, que se movió del viernes al sábado por las inclemencias meteorológicas.

Dennyx celebra su título. Ayuntamiento de Málaga

Así, en su inicio se homenajeó a Afrodiziack, la drag que falleció el pasado verano mientras estaba actuando encima del escenario de su propio local, el Tiki Tiki Show Copas, que montó con su marido y se encuentra ubicado en el municipio malagueño de Torremolinos. Este año, la victoria fue para Dennyx, que deleitó a todo el público con su presentación El Poder de Eiwa. 

Y a las 23.00 horas, la plaza de la Constitución se convirtió en un guateque ochentero. La fórmula funcionó a la perfección el año pasado y este, no podía ser menos. Hasta la madrugada, decenas de personas permanecieron celebrando el carnaval en la calle, entre bailes, algo que hace unos años parecía inimaginable. Enhorabuena a la organización por semejante éxito.