El macroproyecto de deportes extremos de Málaga da un nuevo paso: queda abierto a información pública

Paso a paso, el millonario proyecto de deportes extremos dibujado en la sierra de Matagallar de Coín, sigue quemando etapas. Después de que los promotores activasen la tramitación del plan urbanístico necesario, la operación alcanza un nuevo hito al abrirse públicamente a la consulta y escrutinio de todos los vecinos y colectivos interesados.

En concreto, según ha publicado el Ayuntamiento de la localidad, desde este jueves y por un plazo de 45 días es posible ya analizar el contenido completo de la iniciativa abanderada por la empresa ADR Investment & Development, que, de llevarse adelante, supondrá una inversión próxima a los 300 millones de euros, interviniendo sobre un espacio de 1,3 millones de metros cuadrados.

El camino, no obstante, se antoja arduo, pese a haber recibido los primeros parabienes de la Junta de Andalucía en materia ambiental. Y ello, en buena medida, dada la existencia de un buen número de vecinos que se oponen a su ejecución, aduciendo que afectará de manera severa al acuífero existente en los terrenos sobre los que se desarrollaría.

Desde hace varios años, son muchos los detalles aportados sobre la intervención planteada por esta firma madrileña, en manos de Jaime Ardid Martínez-Bordiú, uno de los bisnietos de Franco.

Y todos ellos ponen de manifiesto la envergadura de una propuesta con la que, según defiende la empresa, se quiere impulsar un modelo de desarrollo sostenible, "que puede inspirar a otras iniciativas en España y Europa". "Los beneficios ambientales, socioeconómicos y educativos que proporciona son de gran alcance y perdurarán mucho más allá de la fase inicial de implementación", indican en la documentación oficial.

Para hacer posible esta iniciativa, la empresa puso en marcha una innovación del actual Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) de Coín. Frente a la ordenación vigente, que permite la construcción de dos campos de golf y 900 viviendas, ADR acota el desarrollo residencial a 510 alojamientos eco-turísticos en régimen hotelero, sin posibilidad de venta, a los que se suman varios recintos innovadores para la práctica deportiva en diferentes modalidades.

Con el objetivo de defender su propuesta, los privados alegan que la edificabilidad potencial sobre los terrenos baja un 40%, al tiempo que se limita la ocupación de las instalaciones a un 9% del sector.

La promotora quiere que Transcendence, como ha sido bautizado, acoja una gran piscina para surf que podría ser la más grande de España y una de las de mayor dimensión de Europa. También se marca el objetivo de organizar y albergar grandes eventos relacionados con el deporte extremo, con iniciativas como wakeboard, kitesurf, surf, skateboard, e-motocross, e-buggies, MTB, rafting, rápel, escalada y salto base…

Otra de las singularidades en la apuesta por las nuevas tecnologías y el metaverso. De hecho, en la memoria original de la propuesta se hablaba de crear "un estadio deportivo virtual", donde los "entusiastas" de los deportes se reunirán con sus avatares virtuales, comprarán y usarán productos de sus clubes favoritos y celebrarán deportes con otros seguidores. "En el metaverso, cualquier cantidad de seguidores de Alemania puede ver el Superbowl en un estadio del metaverso", se indica.

Tomando en consideración el estudio económico que forma parte del expediente ya sometido a exposición pública, los costes de urbanización totales se estiman en más de 22 millones de euros, cuantía a la que hay que sumar otros 48 millones de construcción de los alojamientos turísticos, 64,7 millones para los diferentes mundos de actividades, y 58,5 millones para construcciones auxiliares e infraestructuras deportivas. Este mismo estudio concluye que el proyecto tendrá un impacto favorable para las arcas del Ayuntamiento de 12.564.767,08 euros, incluyendo los impuestos correspondientes.