Así, han sido intervenidas 545 plantas de marihuana en su última fase de crecimiento, un dispositivo para la gestión remota del cultivo, así como útiles para la preparación y venta de la marihuana. La investigación comenzó después de que los agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Antequera tuvieran conocimiento de las actividades criminales llevadas a cabo por miembros de un clan familiar, residentes en Alameda.

Con las primeras pesquisas, los agentes detectaron que todos sus miembros se dedicaban al cultivo, preparación y venta del estupefaciente, ha informado este miércoles la Policía Nacional en un comunicado.

Avanzada la investigación averiguaron que este grupo criminal, especializado en el cultivo de marihuana trabajaba con un equipamiento de última generación que permitía la gestión remota del cultivo. Todo ello suponía una elevada inversión económica pero a cambio optimizaba el crecimiento de la sustancia.

Después de un arduo trabajo, los investigadores identificaron a todos sus miembros, al menos cinco personas, los cuales residían en el mismo lugar donde llevaban a cabo las labores de cultivo, facilitando la supervisión constante de la plantación.

Los agentes han finalizado este operativo contra el tráfico de estupefacientes con la detención de sus cinco miembros, y la práctica de tres registros en los que han intervenido 545 plantas de marihuana en su última fase de crecimiento, un dispositivo para la gestión remota del cultivo, así como útiles para la preparación y venta de la marihuana.

Además, la vivienda se abastecía del servicio eléctrico público por lo que los investigados también han sido arrestados como presuntos responsables de un delito de defraudación de fluido eléctrico.