“Gimme some truth” John Lenno.

La euforia del Gobierno con los datos económicos no resiste un escrutinio serio. Presumir de "gestión" cuando la única diferencia con otros gobiernos es haber tenido toda la facilidad para endeudarse y gastar sin control gracias a Bruselas y el BCE es, como mínimo, engañar. Si Zapatero o Rajoy hubiesen accedido al mayor estímulo fiscal y monetario de la historia, seguramente los resultados habrían sido muy diferentes. Encima, el resultado de la gestión del Gobierno de Sánchez es desastroso.

España no crece, la endeudan: En términos reales, el PIB no ha recuperado el nivel del cuarto trimestre de 2019 mientras la deuda pública sube casi 300.000 millones de euros. En términos nominales, eso significa ocho euros de aumento de deuda por cada euro de rebote de producto interior bruto.

España, con datos del primer trimestre de 2023 e incorporando las nuevas estimaciones del Banco de España, se quedará de nuevo a la cola en recuperación con respecto a los países de nuestro entorno.

El aumento masivo de deuda es preocupante. La deuda pública a efectos de protocolo de déficit excesivo se sitúa en un 113% del PIB pero los pasivos totales de las administraciones públicas superan los 1,9 billones de euros, casi un 150% del PIB.

Los pasivos totales incluyen deuda del estado en manos de la propia administración, que no “cuentan” para Bruselas porque asumen que en un evento de crédito el estado no se pagaría la deuda a sí mismo, pero es un descuento falaz. Si el estado hiciera impago, no cumplir con la deuda en manos de las administraciones sería quebrar la Seguridad Social y cientos de entes. En definitiva, es deuda que se debe y se paga.

El aumento masivo de deuda es preocupante. La deuda pública a efectos de protocolo de déficit excesivo se sitúa en un 113% del PIB

El cacareado récord de empleo deja cifras que aterran a cualquiera. La mayor tasa de paro, la mayor tasa de subempleo y paro juvenil de la UE y la OCDE.

¿Récord de empleo? De los 485.000 empleos que se han 'creado' desde que estalló la pandemia, 270.000 han sido en el sector público: el 56%. Con un déficit estructural y deuda muy elevados, estos puestos de trabajo se pagan con más deuda.

No. Esto no lo ha pasado a todo el mundo. España es el líder de la eurozona en aumento del número de funcionarios pagado con mucha más deuda. En la media de la UE el empleo público apenas ha crecido y en la eurozona ha bajado en el periodo 2019 – 2022. España y Letonia son los países que más han aumentado el empleo público.

¿Récord de empleo? Cuando 20 millones de afiliados trabajan menos horas que 19,5, claramente no hay récord de empleo.

La duración media de los contratos se ha desplomado de 54 días a 45,3 solo entre 2021 y 2023, lo que demuestra el nivel de precarización real. Mientras tanto, el número de desocupados y desempleados sube a 3.832.835 en abril.

España es el líder de la eurozona en aumento del número de funcionarios pagado con mucha más deuda

Hay 4.314.000 demandantes de empleo en abril de 2023. En junio de 2018 había 4.470.000. ¿Qué récord de empleo?

Aumentar el empleo público financiado con deuda es una terrible estrategia para maquillar los datos de empleo disparando los desequilibrios. Es la estrategia que llevó a cabo el PASOK en Grecia y que casi lleva al país al hundimiento.

El Gobierno se vanagloria de que ellos han bajado la inflación, pero los datos del INE muestran como la inflación a impuestos constantes apenas se ha reducido. La inflación es culpa del exceso monetario del que se ha beneficiado el Gobierno y ahora se modera porque el BCE sube tipos y reduce la cantidad de dinero en el sistema. Nada que ver con el Gobierno.

Pero la inflación es acumulativa. La inflación, el impuesto escondido, en abril sube un 4,1%, un aumento de ocho décimas en tasa anual. Los alimentos suben un 12,9% en tasa interanual.

El IPC ha aumentado un 15,18% desde que gobierna Sánchez. La inflación subyacente, un 13,25%.

No sorprende que España sea el país en el que más se ha perdido renta disponible, y el peor en convergencia con Europa. La renta per cápita ajustada por poder adquisitivo, según Eurostat, ha retrocedido en términos absolutos y muy por debajo de la media de la Unión Europea (85 vs 100).

Desafortunadamente, la receta keynesiana de imprimir dinero y aumentar masivamente el déficit ha dejado menos crecimiento, pero calidad de empleo y empobrecimiento. Alguno dirá que es porque no gastaron lo suficiente.