La vivienda de segunda mano no parece afectada ante la subida de los tipos y la consiguiente dificultad que comporta a la hora de comprar casa. En el último año, los precios en este parque de viviendas han subido un 7,17%, según pisos.com, y un 7,2% según Idealista. Un alza que no se ha detenido ni siquiera en los meses en los que apretaba el BCE, aunque sí ha moderado su crecimiento.

El atractivo de esta opción no decae. Según pisos.com, los precios superan ya los 2.000 euros por metro cuadrado; hace un año se situaba en 1.932 euros. 

El encarecimiento de la vivienda de segunda mano no se ha frenado ni siquiera con las últimas subidas de tipos, aunque es cierto que la subida ha sido más moderada cada mes. En julio, por ejemplo, repuntó un 0,69%.

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Un crecimiento "suave", a pesar del "enfriamiento que atraviesa el mercado, y que se evidencia en el menor número de compraventas e hipotecas registradas desde la primavera, ha apuntado el director de Estudios de pisos.com, Ferran Font.

Pero la demanda sigue siendo elevada, y ante una oferta que insiste en revelarse insuficiente, sobre todo por "lo que concierne a la obra nueva", se revaloriza la de segunda mano, que tiene de media unos 43 años, de acuerdo un informe realizado por la Federación Nacional de Asociaciones Inmobiliarias (FAI).

Según pisos.com, las regiones más caras en julio de este año fueron Baleares (4.126 euros por metro cuadrado), Madrid (3.479 euros por metro cuadrado) y País Vasco (2.988 euros por metro cuadrado).

Por su lado, las más baratas fueron Extremadura (817 euros por metro cuadrado), Castilla-La Mancha (876 euros por metro cuadrado) y Castilla y León (1.198 euros por metro cuadrado).

Interanualmente, los repuntes más elevados se registraron en Baleares (17,64%), Canarias (12,65%) y Comunidad Valenciana (11,80%), no registrándose ningún ajuste.

En cuanto a las capitales de provincia, las subidas más intensas frente a julio de 2022 se produjeron en Palma (19,35%), Málaga (18,78%) y Pontevedra (18,64%). Las que más bajaron fueron Huesca (-8,48%), Zamora (-7,06%) y Vitoria (-3%).

Ordenando las capitales de provincia por precio, San Sebastián fue la más cara, con 5.794 euros por metro cuadrado. Le siguieron Madrid (4.606 €) y Barcelona (4.533 €). La capital de Jaén fue la más asequible con 1.112 euros por metro cuadrado. Otras capitales de provincia baratas fueron Zamora (1.159 €) y Ciudad Real (1.190 €).

El ascensor, principal hándicap

Además de ser viviendas de más de 40 años, el informe de la FAI - que recopila información de entre las cerca de 1.200 agencias inmobiliarias que forman parte del colectivo- revela algunas características llamativas de los pisos de segunda mano.

Por ejemplo, que las principales deficiencias que presentan los inmuebles o edificios de vivienda usada son la falta de ascensor en el 32,08% de los casos, poco espacio exterior en el 24,91% de los casos, falta de aislamiento térmico en el 23,74% de los casos y ausencia de rampas en el 19,25% de los casos.

Son datos que “evidencian el déficit de inmuebles energéticamente eficientes y poco o nada accesibles para las personas con movilidad reducida o personas mayores en el actual mercado inmobiliario”, ha remarcado el presidente de la FAI, José María Alfaro.

En cambio, remarca que las agencias inmobiliarias sí están percibiendo un aumento en la demanda de este tipo de viviendas entre los compradores. Más concretamente, uno de cada 3 (el 31,1%). Y en la mayoría de los casos, si no existe demanda, se debe a la falta de oferta existente de viviendas sostenibles y de accesibilidad, subraya.