El déficit de sanitarios, especialmente de médicos de familia, ha sido uno de los motivos que ha impulsado a miles de ciudadanos a tomar las calles de Madrid el pasado domingo en defensa de la sanidad pública. La nueva concentración, que ha aglutinado a 250.000 personas, según la Delegación de Gobierno de Madrid, también ha querido servir de apoyo a los profesionales de la sanidad, que exigen una reducción de las agendas en los centros de salud, así como una mejora generalizada de las condiciones laborales.

Ante esta crisis sanitaria que traspasa fronteras autonómicas, el Ministerio de Sanidad trata de revertir la situación ofertando un mayor número de plazas MIR con las que aumentar las plantillas en el conjunto de España. Sin embargo, la realidad es que, tras un periodo de formación que alcanza una década, son muchos los sanitarios que deciden rechazar la vacante que les ha sido asignada. Así, cierran la puerta a la formación e ingreso en las filas de un Sistema Nacional de Salud (SNS) necesitado de facultativos.

Según los últimos datos del Ministerio de Carolina Darias, 95 posibles futuros especialistas renunciaron a la plaza de formación en la última convocatoria, la correspondiente al 2021-22, y Medicina de Familia fue la especialidad que salió peor parada.

[Así es el reparto de las 8.550 plazas MIR por especialidades para el próximo año 2023]

En concreto, esta disciplina acumuló un total de 29 renuncias una vez finalizado el procedimiento de elección y adjudicación. Sin embargo, a esta cifra hay que sumar las 93 plazas que quedaron desiertas y que, por tanto, no fueron escogidas por los aspirantes en ningún momento. Sanidad quiso cubrir las 217 plazas que se quedaron sin adjudicar en primera ronda con la celebración de un MIR extraordinario, pero no consiguió completar el cupo. 

Por tanto, la última convocatoria de Sanidad se saldó con 122 vacantes sin dueño en el área más necesitada del sistema sanitario.

Microbiología y Parasitología (9), Anatomía Patológica (6) y Medicina Preventiva y Salud Pública (5) fueron otras de las especialidades que presentaron un mayor número de rechazos por parte de los médicos. En conjunto, no se cubrieron 188 plazas en la última convocatoria MIR. O, lo que es lo mismo, 188 futuros especialistas menos.

Eso sí, en lo que se refiere única y exclusivamente al número de renuncias, estas cifras son mejores que las cosechadas en el ciclo 2020-21, cuando 173 médicos decidieron no tomar posesión de la plaza; 55 de ellos futuros médicos de familia. En la convocatoria 2019-20, fueron 169 los que no asumieron la especialidad y centro de formación asignado; 46 en Medicina Familiar y Comunitaria.

Un año antes, en el periodo 2018-19, las vacantes fueron 165, con 43 futuros médicos residentes de familia. Finalmente, Sanidad comparte que, en 2017-18, 197 candidatos renunciaron a la plaza; 52 en la puerta de entrada al sistema sanitario.

En conjunto, estos datos reflejan que 799 médicos han rechazado la plaza de médico residente en el SNS en las últimas cinco convocatorias. Las condiciones que se ofrecen a los médicos especialistas en España, que nada tienen que ver con las de los países de nuestro entorno, pueden ser uno de los motivos que impulse a los candidatos a tomar esta decisión.

Alternativas al MIR

También están los que tratan de buscar otras alternativas o repetir el examen MIR para obtener una puntuación más elevada que les permita escoger plaza en una especialidad o destino diferente al asignado en un primer intento. Lo cierto es que la historia se repite y, año tras año, un notable número de estudiantes de Medicina trata de huir de Atención Primaria.

Los esfuerzos no cesan por parte del Ministerio de Sanidad, al menos en lo que al número de plazas se refiere. De cara a esta convocatoria, la 2022-23, el órgano ministerial ha incrementado el cupo hasta las 8.550 vacantes, un 5% más que en la convocatoria previa.

Y la especialidad con mayor oferta vuelve a ser Medicina Familiar y Comunitaria, con 2.455 plazas. A ellas aspiran 12.668 médicos, que fueron llamados al examen el pasado 21 de enero.