Una imagen de Rodalies.

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Observatorio de la movilidad

El éxito de la nueva Rodalies dependerá de la gestión de los más de 400 nuevos trenes que renovarán la red española

El Gobierno recibirá estos convoyes que distribuirá por distintos servicios, incluido el de la nueva sociedad compartida con la Generalitat de Cataluña.

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Rodalies de Cataluña, la nueva empresa mixta entre Renfe y la Generalitat, será una realidad en 2026. Un compromiso político del Gobierno con sus socios y del que se espera mucho, sobre todo por parte de unos viajeros cansados de los continuos retrasos y problemas del actual servicio.

“Espero que en dos o tres años los usuarios noten una sustancial mejora en puntualidad, calidad y regularidad del servicio”, señaló el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en el que se aprobó la creación de dicha sociedad.

Pero su éxito no será cosa de la nueva gestión como muchos creen, sino más bien de tres grandes contratos de cerca de 400 trenes (201 de Alstom, más de 130 de Stadler y 79 de CAF) que en los próximos años llegarán para renovar la flota de trenes de toda España, incluida la nueva Rodalies.

Y más concretamente, su éxito está supeditado al reparto ágil o no que haga de ellos el Gobierno.

Los servicios de Cercanías, Media Distancia y ancho métrico también recibirán muchos de ellos, por lo que entran en escena más regiones.

Si bien es cierto, Cataluña será una de las grandes beneficiarias de esta renovación de flota que el Gobierno calificó en su día de “histórica”.

Con los tres contratos, se destinarán 101 unidades a modernizar la flota catalana. De ellos, 69 son para el servicio de Rodalies (49 de Alstom y 20 de Stadler). El resto, un total de 32, se destinarán a media distancia (de CAF).

Primeros trenes

De momento, ya está en pruebas un nuevo tren de Alstom para Rodalies. Está previsto que el proceso de homologación finalice a lo largo de este año para que las primeras unidades puedan operar en 2026 en Cataluña.

Es decir, cuando entren en funcionamiento ya lo harán bajo la gestión de la nueva sociedad Rodalies Cataluña. Después irán llegando el resto de unidades. Pero esto será de forma escalonada. En el caso de los trenes Alstom, el fabricante prevé entregar entre tres y cuatro convoyes al mes.

Eso quiere decir que en el mejor de los casos podrá tener listos 48 al año y en el peor, 36. Por lo que tardará entre cuatro y cinco años en completar el pedido.

En este caso, la entrega de los 49 trenes Alstom para Rodalies dependerá de la gestión del Gobierno. Podría completarse en un año o alargarse hasta 2030 si se anteponen también los intereses de otros servicios de tren.

La nueva Rodalies

Independientemente de ello, la nueva empresa bajo el nombre de Rodalies de Cataluña deja de ser una promesa para ser ya una realidad.

Estará controlada al 50,1% por Renfe y al 49,9% por la Generalitat, aunque esta última tendrá cinco consejeros (uno de ellos será el presidente) y la empresa estatal otros cuatro.

Tendrá, inicialmente, un capital de 2 millones de euros. La idea es que la empresa quede constituida e inscrita en el Registro Mercantil antes del 31 de diciembre de 2025 y que pueda empezar a operar a partir de enero de 2026.

Además, tal y como avanzó Puente la nueva empresa “va a asumir progresivamente la gestión de las estaciones” empezando por las gestionadas por Renfe. También desarrollará “una identidad propia que refleje el arraigo territorial”. Es decir, tendrá un logotipo distinto al actual.

El titular de la cartera de Transportes aseguró que con esta empresa mixta lo que tratan de conseguir es un equilibrio en tres aspectos.

El primero es la “gestión más próxima al territorio con capacidad real de decisión de Cataluña sobre el servicio con independencia de que la mayoría de capital es Renfe”.

El segundo es mantener los estándares del sistema ferroviario nacional y el tercero es la protección de los trabajadores del grupo, que se mantendrán bajo el convenio colectivo de Renfe.