Todo ello ha provocado que durante los primeros seis meses del año la producción de las plantas españolas se haya situado en 1.205.577 unidades. Un nivel que representa un descenso del 21% en comparación a los niveles prepandemia. Ante este complejo contexto, la industria del automóvil se prepara para un próximo semestre en el que el objetivo es compensar parte del retroceso de la primera mitad del año.

Si se analizan los datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) sobre destino de los vehículos fabricados en España, la fotografía generada entre enero y junio ofrece luces y sombras para la industria. En primer lugar, la debilidad del mercado local es evidente. Sólo 14 de cada 100 coches manufacturados en España acabaron dentro de las fronteras de nuestro país. 

Esta cifra supone un retroceso de tres puntos porcentuales en comparación a los niveles de 2020. Si miramos a la tendencia de los años previos a la pandemia, la distancia es aún mayor. Entre 2015 y 2019 el mercado interior absorbió entre un 20% y un 18% de la producción española de automóviles.

Cambios significativos en las exportaciones

El comportamiento de las exportaciones también ha sufrido cambios de cierto calado. En concreto, el peso de Europa ha menguado de forma notable. La caída de la demanda de los mercados europeos ha provocado una reducción de la cuota de los países comunitarios cercana al 4%.

La Europa de los 14 cuenta con un descenso del 4,3% entre enero y junio. Unos niveles de retroceso que se quedan en el 3,7% en el caso de la Europa de los 24, que acapara el 70% del total de las exportaciones.

Al analizar el comportamiento de los países, también se pueden observar cambios en comparación a otros ejercicios. El más significativo de todos es la pérdida de peso del mercado británico. El Reino Unido ha cedido su puesto en el tercer puesto del podio de países receptores de vehículos españoles a Italia. Las 137.000 unidades del país transalpino han superado holgadamente a las 125.000 que partieron rumbo a UK.

Por su parte, Francia lidera con 193.000 unidades y un aumento del 25% en comparación a 2020. Alemania queda en segunda posición con 175.000 unidades y un crecimiento del 8% en comparación a los seis primeros meses de 2020. 

Turquía crece con fuerza

Al margen de los destinos tradicionales de los vehículos españoles, resalta la irrupción de Turquía. Este país se hace con el quinto lugar en el ranking de las exportaciones españolas con 46.000 unidades. Una cifra que gana en importancia al constatar que supone un crecimiento del 156% frente a los registros del año precedente. El mayor incremento registrado por cualquier país en estos seis meses. 

Fuera de Europa, América se erige como el segundo continente con más apetito de vehículos fabricados en España. Acapara el 3,4% de las exportaciones hasta junio. México destaca como el destino de 16.000 unidades españolas, duplicando las cifras de 2020. Chile, por su parte, alcanzó las 9.400, frente a las 3.400 del pasado ejercicio. Por el contrario, Estados Unidos descendió desde las 7.900 unidades en 2020 a las 3.300 de este año.

África se queda muy cerca de América gracias a un crecimiento importante. En concreto alcanzó el 3,3% de las exportaciones frente al 2,2% de 2020 o al 2,3% de 2019. Aquí destaca Marruecos con 11.300 unidades, que multiplican por más de dos veces las 4.700 del pasado año. Egipto se convierte en el segundo destino africano para los vehículos españoles con 9.800 unidades. 

Así las cosas, la industria del automóvil en España firma un primer semestre con algunas luces que pueden hacer compensar las sombras mayoritarias que han dominado el sector en el primer semestre de 2021. Los dos próximos trimestres serán fundamentales para recuperar el terreno perdido si la pandemia y el apetito de los consumidores lo permiten.