agresion
Ocho consejos para que los empleados del Popular se defiendan de los clientes agresivos
Atentos a los puños cerrados y 'echar la culpa' al FROB y al BCE. La liquidación del Popular ha disparado el nivel de histeria de clientes y accionistas que acuden a descargar su ira en las sucursales del banco, lo que ha obligado a la entidad a distribuir un nuevo Protocolo de Actuación ante situaciones conflictivas. ¿Qué pasos deben seguir los empleados?
Que tu banco de toda la vida desaparezca. Que si además eras accionista, hayas perdido todo tu dinero. Y que las esperanzas en recuperar el cien por cien de esas pérdidas sean prácticamente nulas. Los clientes y accionistas del Banco Popular tienen motivos de sobra para estar enfadados. Pero este sentimiento de ira se ha saldado con graves incidentes en algunas sucursales donde los clientes acuden a pagar su enfado con ¿la cara visible del banco¿.
Fuentes sindicales reconocen que esta semana se han producido insultos y agresiones, ¿incluso físicas¿ en algunas sucursales. ¿Al final, hay municipios pequeños donde todo el mundo se conoce, y se han dado casos de agresiones incluso fuera del puesto de trabajo¿, indican.
Ante estos hechos, los sindicatos solicitaron a la entidad un Protocolo con carácter urgente para afrontar las situaciones conflictivas que se están desarrollando. Este es un resumen de los ocho puntos más importantes que han remitido a todos los trabajadores:
- Prestar especial atención a la comunicación no verbal, como movimientos nerviosos, mirada de ira, o puños cerrados. En este tipo de situaciones, aconsejan mantener una distancia prudencial sobre la persona que muestra hostilidad, ¿equivalente a la longitud del brazo¿.
- Mantener el equilibrio emocional y el control de nuestras reacciones, no respondiendo en ningún momento a las provocaciones , amenazas o insultos que se nos puedan realizar.
- Trasladar comprensión hacia su situación y explicar que, en este caso, la medida adoptada ha sido ajena al personal del centro de trabajo, impuesta por el FROB y el BCE, por lo que no está en nuestra mano el actuar frente a dicha situación, dirigiéndolo, en todo caso, a trasladar cualquier aspecto sobre este particular a la Oficina del Accionista, facilitándosele los datos necesario para que contante con dicha Oficina (Servicio de atención al accionista).
- En caso de que la persona siga insistiendo en sus argumentos y pretensiones, le indicaremos con la mayor cordialidad posible que desde la Oficina no podemos ofrecerle más ayuda o colaboración.
-Si la tensión de la situación va en aumento y la persona no atiende a razones o que su respuesta pueda poner en peligro nuestra integridad física, hay que denunciar los hechos ante la Policía, efectuando llamada al 112.
La mayoría de trabajadores consideran insuficiente y ¿simplista¿ este documento, y abogan por otro tipo de medidas de carácter preventivo, como el refuerzo de seguridad en las sucursales, ¿especialmente en aquellas en las que solo trabaja una persona¿, o una mayor facilidad para trasladar a los empleados que lo soliciten a otras sucursales.
El Protocolo incluye además 3 recomendaciones para las situaciones conflictivas que puedan producirse en la calle, fuera de la oficina.
En caso de sufrir cualquier tipo de amenaza o agresión verbal o física fuera del centro de trabajo, trate de mantener la calma y el equilibrio emocional. Por su seguridad, lo más aconsejable es el tratar de abandonar el lugar a la mayor brevedad posible. En el supuesto de que no le fuese posible abandonar el lugar, ponga los hechos en conocimiento de la Policía, contactando a la mayor brevedad posible con Recursos Humanos para que se le puede prestar toda la ayuda necesaria. Ante unos hechos de esta naturaleza y en caso de que lo consideren necesario, contactarán con el Servicios de Prevención de Riesgos Laborales para que se les pueda prestar todo el apoyo médico o psicológico que pudiera precisar.