«Me gustaba, me gusta y me va a seguir gustando la bolsa española en el medio y largo plazo»

«Me gustaba, me gusta y me va a seguir gustando la bolsa española en el medio y largo plazo»

Mis finanzas

«Me gustaba, me gusta y me va a seguir gustando la bolsa española en el medio y largo plazo»

José María Luna, director de análisis de Profim EAFI, repasa cómo se encuentra el entorno de los fondos de inversión y dónde se encuentran las principales oportunidades.

8 marzo, 2017 12:19

 

 

 

¿Es partidario de apostar por fondos que se centren en renta variable norteamericana o las valoraciones que se han alcanzado deberían hacernos mantener la cautela?

Sin duda alguna ahora mismo estaría dentro de la renta variable norteamericana. Creo que sería una temeridad no tener Estados Unidos en cartera, sobre todo la parte de bolsa. Es verdad que sí que recomiendo que se haga con cierta cautela a tenor de las valoraciones que estamos viendo en estos instantes y siempre a través de fondos de gestión activa. Se está generando tal controversia y tal disputa entre la gestión pasiva frente a la gestión activa, sobre todo después de la carta escrita por Warren Buffett, que creo que es absurdo. Ambas son compatibles.

El mal enemigo a batir sin duda es la mala gestión y el que nos venda ideas pero no nos vendan asesoramiento y hoy por hoy existen fondos de inversión a la hora de posicionarnos en renta variable norteamericana que sí que aporta valor. Por ejemplo fondos como el Vontobel US Equities, fondos como Goldman Sachs US Core a través de la utilización del big data. Fondos también como el JP Morgan US Strategy Growth puede ser una idea interesante. Fondos de pequeñas compañías Legg Mason o Schroeders. Incluso a través de Fidelity america. Hay un elenco de productos que además de forma consistente son capaces de batir la bolsa norteamericana. Es verdad que en el caso de Estados Unidos nos encontramos valoraciones muy ajustadas, estamos en un escenario en el cual es muy difícil ver gangas en estos instantes.

Estamos viendo un entorno de excesiva complacencia. El diez años norteamericano está en torno al 2,5%. Al 2,6% que sería un primer nivel de resistencia empezaría probablemente a encenderse ciertas luces ámbar y podría ser uno de los elementos que podría hacer corregir a los mercados de bolsa. No solo en el caso norteamericano sino también a nivel mundial. Por otro lado tenemos a la Fed que ha acelerado el último discurso de Yellen insistiendo que probablemente en este mes de marzo es un buen mes para subir tipos de interés. De hecho, podría un aspecto negativo si lo hiciera después de los datos económicos. Ahora vamos a la parte positiva. Eso sería la parte negativa incluyendo a Donald Trump y a su Twitter que genera tantas tensiones geopolíticas.

Desde el lado positivo está la mejora de todas las expectativas tanto de los inversores como de los consumidores de las propias empresas. La mejora de los datos macroeconómicos, la mejora de los resultados de las empresas. La segunda variable es el I+D+I. EEUU es el país que en cuanto a dinero es el que más se gasta ahora mismo en I+D+I. En porcentaje de PIB creo que solo Israel y Corea del Sur estarían superando a EEUU. Pero es un país que invierte mucho, en productos que gustan mucho, y que son rentables. Esto es muy importante tenerlo presente. Cuando uno piensa en las compañías líderes a nivel mundial piensa en compañías estadounidenses. También compañías menos conocidas que podrían estar en segmentos industriales. El S&P 500 no es precisamente un índice en el cual la propia fortaleza del dólar le puede afectar sobre todo porque sea un índice muy netamente exportador sino que refleja muy bien lo que son las ventas hacia el país. Las pretensiones de mejora de crecimiento económico por la reforma fiscal hace que EEUU sí que haya que tenerlo en cartera fundamentalmente por esas mejoras macro y micro y porque en estos momentos vemos que las compañías sí que están mejorando sus resultados empresariales y sí estaría en Estados Unidos pero a través de gestión activa.

Dentro de Estados Unidos se habla mucho de las políticas fiscales de Trump, aunque también del proteccionismo. ¿Sería partidario de apostar por fondos que se centren en tecnológicas (beneficiadas por la parte fiscal y perjudicadas si hay proteccionismo) o no?

Sin duda alguna. La tendencia de la tecnología es imparable. La tecnología la tenemos en nuestro día a día todos. Con lo cual creo que es uno de los sectores, que es amplísimo. Con muchos subsectores en el cual uno se puede tratar de aprovechar. Creo que la tecnología hoy por hoy es algo que debemos de seguir jugando invirtiendo o apostando. No todo vale, puesto que puede haber cierta exuberancia en algunas compañías después de todo lo que han corrido. Pero la tendencia es imparable. Este nuevo proteccionismo que aboga Trump, pero que no es solo el caso de EEUU, también aparece en Francia y lo hemos visto en el caso del Reino Unido. Lo vemos también en otras zonas del mundo. Por tanto, no es solo el caso norteamericano, pero la tecnología es algo que nos rodea.

Nos rodea la robótica, el fintech, todo lo que es la tecnología aplicada a la medicina, la tecnología aplicada a las energías limpias. Veamos lo que está ocurriendo con Tesla y la venta de vehículos eléctricos. En este sentido todo lo que es la tecnología también aplicada a la automoción. Es decir, hay un sinfín de campos que evidentemente se pueden aprovechar y creo que es muy importante los disruptores tecnológicos, como el caso del sector financiero. Hablamos de la controversia de gestión activa y gestión pasiva. ¿Es mejor el asesoramiento robotizado o no robotizado? De nuevo la combinación de ambos es también una ventaja. Los asesores financieros debemos utilizar la tecnología. Pasamos de un mundo de la no existencia de impresoras, a las impresoras matriciales, a las impresoras 3D.

Creo que en la mejor de las imaginaciones de Isaac Asimov lo que está ocurriendo a día de hoy le está superando. Aprovechémoslo. Hagámoslo a través de fondos de inversión con gestores que están viviendo muy de cerca con la comunidad universitaria, con las empresas desarrollando sinfín de artilugios tecnológicos que en muchos casos sí nos hacen la vida mejor y mucho más sencillas. Con lo cual, sí a la tecnología aunque haría una llamada a la cautela porque todo esto ha ocurrido mucho y comprar creo que hay determinados sectores como la biotecnología en el pasado ejercicio que explosionó en cuanto múltiplos y ha tenido una corrección. Lo único es que cualquier cosa no vale a cualquier precio. Aprovechando ciertas correcciones se puede recomponer la cartera. Pero por supuesto que sí.

En Europa tenemos tensiones políticas con las elecciones de Francia que se empiezan notar en las primas de riesgo. Además seguimos con la misma tónica en política monetaria. ¿Hay que evitar fondos de renta fija gubernamental en este entorno aunque veamos la inflación repuntando?

A corto plazo es uno de los nichos de mercado en los que yo no estaría. Sigo pensando que es un segmento peligroso en el cual se pueden tener rentabilidades negativas. De hecho en lo poco que llevamos de ejercicio acumula rentabilidades negativas muchos fondos que están invirtiendo en deuda de largo plazo, sobre todo gubernamental. No solo lo que pueden llegar a ser las tensiones geopolíticas, que aumentan las primas de riesgo. Tensiones geopolíticas que de nuevo son singulares en el caso europeo: Lo que pasa que en Europa en el posible retraso de las elecciones italianas, lo que tenemos delante en Holanda, con las elecciones francesas, también lo que puede ocurrir en Alemania. Hay encima de la mesa un modelo de Europa en el cual no es comprendida porque hay una desigualdad que muchas veces se está desestimando. Todo lo que ha sido la globalización, todo lo que