Un trabajador sostiene un cartel de Despacio frente a la Bolsa de Nueva York.

Un trabajador sostiene un cartel de "Despacio" frente a la Bolsa de Nueva York. Reuters

Mercados

Deutsche, Société, Morgan Stanley... La banca de inversión avisa de que las bolsas caerán en verano por culpa de EEUU

Las valoraciones y la sequía que los parqués suelen sufrir en verano también apoyan estas previsiones. Sin embargo, las entidades recomiendan comprar en las bajadas.

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Deutsche Bank, Morgan Stanley, Société Générale y Evercore ISI han advertido en los últimos días de que el S&P 500 caerá en las próximas semanas o meses.

Las predicciones se basan en los malos datos económicos de Estados Unidos, la fuerte recuperación que registra el selectivo de Wall Street y la sequía estival que suelen sufrir los mercados financieros en verano.

En Morgan Stanley esperan una corrección de hasta el 10% en el tercer trimestre del año. Advierten de que los aranceles lastrarán el consumo de los estadounidenses y los balances de las empresas del país.

Los analistas de Evercore prevén un descenso aún mayor, del 15%, mientras que en Deutsche Bank anticipan "una modesta caída" en el tercer trimestre de este ejercicio.

Los expertos de Société Générale también anticipan que el S&P 500 podría necesitar una "pausa para tomar aire". Lo que haga el índice más importante del mundo puede extenderse al resto de bolsas.

Los datos de EEUU

Las previsiones de caídas se suman a la creciente preocupación por la economía estadounidense. Las cifras conocidas la semana pasada, relativas a la inflación y al mercado laboral, fueron un jarro de agua fría para los mercados.

El golpe principal lo dieron los datos de empleo de Estados Unidos. La creación de nuevos puestos de trabajo se redujo en julio hasta los 73.000. Se esperaba una ralentización, pero no un frenazo de tal intensidad.

Además, se revisaron las cifras de junio y mayo, eliminándose de un plumazo 258.000 nuevos empleos. Por tanto, EEUU creó 35.000 empleos al mes entre mayo y julio. Es la media trimestral más baja desde junio de 2020.

Por otro lado, el índice de precios de gasto de consumo personal de Estados Unidos, la estadística favorita de la Reserva Federal (Fed) para monitorizar la inflación, subió en junio dos décimas al 2,6% interanual.

La variable subyacente, que excluye de su cálculo los precios de los alimentos y la energía por su mayor volatilidad, cerró el sexto mes de 2025 con un incremento del 2,8%, sin cambios.

Al contrario de lo que ocurrió con el empleo, los datos de inflación sorprendieron al alza. Las cifras de abril y mayo, además, se revisaron al alza.

En Lazard vaticinan que "tanto este indicador como el IPC se acelerarán de nuevo a medida que los aranceles se vayan trasladando a los consumidores a lo largo de la cadena de suministro".

Sostienen que "es probable que el aumento supere los 100 puntos básicos, dado el incremento de aproximadamente 15 puntos porcentuales en el arancel medio ponderado sobre las importaciones de bienes a EEUU".

Desde el 'Día de la Liberación'

Al runrún de estanflación –fenómeno que se da cuando cohabitan una alta inflación, estancamiento del crecimiento económico y un alto desempleo– se suma las fuertes subidas registradas desde el Día de la Liberación.

Desde los mínimos alcanzados tras conocerse los aranceles recíprocos en Estados Unidos, el S&P 500 se ha disparado un 30,4%. La subida del Dow Jones es del 20,6% y la del Nasdaq Composite de casi el 42%.

Con Wall Street cerca de sus máximos históricos y con los índices europeos cerca de máximos de más de una década, en Link Securities creen que los inversores "están necesitados de nuevos catalizadores para seguir subiendo".

Advierten de que "las próximas semanas no parecen ser el mejor momento para encontrarlos".

"Muchos operadores se encuentran fuera del mercado por vacaciones", por lo que es posible que se dé "una caída de los volúmenes de contratación y, derivado de ello, una mayor volatilidad en las cotizaciones de los valores".

Es por todo ello que no les sorprendería "que en los próximos días o semanas se produzca una toma de beneficios de aquellos valores que han subido mucho en los últimos meses o una rotación de carteras, hacia aquellos que se hayan visto o se vean menos afectados por el efecto tarifas".

Lo que dice la historia

El verano es uno de los peores periodos para los mercados de renta variable. Entre 1950 y 2024, el S&P 500 ha caído, de media, un 0,01% en agosto y otro 0,72% en septiembre. Septiembre es, de hecho, su peor mes del año.

No es al único índice que le sucede. Aunque no sean sus meses más negativos, el Ibex 35 español suele caer en agosto y septiembre. El saldo del noveno mes del año en la última década es de seis bajadas y cuatro subidas.

Lo mismo ocurre con el Euro Stoxx 50. El índice europeo también ha descendido en seis meses de septiembre de los últimos diez.

Los reajustes de cartera, la baja liquidez y la menor actividad debido a las vacaciones reducen el volumen de negociación, aumentando la volatilidad y el riesgo de caídas bruscas.

Comprar en las caídas

A pesar de que varios bancos de inversión advierten de que en las próximas semanas o meses las bolsas pueden caer, consideran que los descensos del S&P 500 son oportunidades para invertir.

Desde Deutsche Bank recuerdan que, históricamente, el S&P 500 experimenta caídas de alrededor del 3% cada mes y medio o dos meses y descenso de alrededor del 5% cada tres o cuatro.

"Somos compradores de caídas" aseguran en Morgan Stanley.