La relación de Grifols y Scranton Enterprises, un vehículo inversor de la familia Grifols, y la consolidación en sus cuentas de Haema y BPC Plasma -pese a poseer el 0% de cada una de ellas- es lo que ha despertado la suspicacias de la firma que actúa como un hedge fund.

Los acontecimientos se sucedieron a partir de la noche del lunes, cuando -a través de la red social X- Gotham City adelantó que publicaría un informe sobre una gran cotizada española. La compañía, que se defendió de las acusaciones, se desplomó un 26% en bolsa. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha comenzado a recabar información sobre lo sucedido.

Qué es Gotham City Research

El informe que ha tumbado la cotización de Grifols lo firma Gotham City Research. Se trata de una firma estadounidense de análisis que se considera a sí misma como “un luchador contra el fraude”, según publica The Wall Street Journal. Sus orígenes se remontan a 2012, cuando Daniel Yu la creó.

Al igual que de Batman, poco se conoce respecto a su figura. Estudió matemáticas en la universidad tecnológica de Massachusetts (MIT) y no suele dar datos sobre los resultados que conllevan los informes realizados por su firma.

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Cabe recordar que además de publicar análisis sobre las compañías, Gotham City sigue el modus operandi de los hedge funds: utiliza derivados para tomar posiciones cortas sobre quienes serán sus futuras víctimas.

Así, toman acciones durante un tiempo concreto y, a la hora de devolverlas, las compran en el mercado aunque a un precio mucho menor. Luego las entregan a los prestamistas y se quedan con la diferencia.

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Quindell, la compañía de software para seguros Ebix, el minorista Tile Shope y la plataforma de búsqueda Bluecora son algunas de las empresas señaladas por Gotham. También lo es la compañía francesa SES-Imagotag, sin olvidar a Gowex.

Grifols es la última de la lista. Y Gotham City ya ha comenzado a sacarle partido. El fondo comunicó el lunes a la CNMV una posición corta sobre Grifols del 0,57% del capital. Gracias a ella, la firma ha obtenido unas ganancias -debido a la caída de la cotizada catalana- de unos 9 millones de euros. Y ello sólo en la jornada del martes.

Grifols se hundió en bolsa

Gotham City Research advirtió en la noche del lunes de que publicaría un informe sobre una gran cotizada española. Las especulaciones, y el miedo, comenzaron a recorrer el mercado hasta que, poco antes de la apertura de la sesión del martes, se conoció que la señalada era Grifols.

El impacto en la cotización de la farmacéutica no se hizo esperar demasiado, la hora y media que tardaron en casar las órdenes de compra y venta. El primer golpe fue una caída del 42%.

Al final de la sesión, el desplome se redujo al 25,91%. La caída responde a las acusaciones de Gotham City Research, que llegó a señalar que no se podía invertir en Grifols y que sus acciones “valen cero”. Exactamente, según sus cálculos los títulos "están sobrevalorados entre un 34% y un 75%".

"Aunque todavía hay que esperar los futuros acontecimientos de la compañía farmacéutica, las presuntas irregularidades en sus resultados son de una magnitud muy relevante, que en caso de confirmarse podría empujar a niveles históricamente bajos a su cotización", subraya el analista de XTB Javier Cabrera.

Qué dicen los analistas

Aunque no hay un consenso total, para algunos analistas las dudas sobre la viabilidad de Grifols no son una sorpresa. Patricia Cifuentes, analista de Bestinver Securities, recuerda que “llevamos años ajustando el ratio de apalancamiento”. "Parece que Gotham ha inventado la rueda, pero nadie que conozca la historia debería sorprenderse por ello", subraya.

En ese mismo sentido, los expertos de Bankinter añaden que “no parece que [los analistas de Gotham] estén descubriendo nada realmente nuevo”. Según los cálculos de la entidad española, el ratio deuda/ebitda ajustado de Grifols es del 9,0x.

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Pero no todos los analistas comparten esa opinión. Los expertos de Renta 4 Banco han tachado de "inexacto, exagerado y extremista" el informe, "en muchos de sus argumentos", al tiempo que lo ha considerado "interesado", dada la posición bajista del emisor de dicho análisis.

Por su parte, desde la dirección de análisis de Banco Sabadell han señalado que la mayor parte de los argumentos presentados tienen que ver con la falta de exactitud de la información reportada y no con la evolución subyacente del negocio.

La defensa de Grifols

Para defenderse de los ataques de Gotham, Grifols remitió dos hechos relevantes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En el primero de ellos negó “categóricamente cualquier acusación de prácticas contables o de información erróneas de nuestros estados financieros consolidados”.

En el segundo, la cotizada catalana defendió el tratamiento contable que ha realizado en las operaciones que aparecen en el informe de Gotham y recordó que dicho tratamiento "está totalmente refrendado" por su auditor, KPMG e informado al regulador español.

La investigación de la CNMV

A la CNMV le toca ahora “recabar información adicional para aclarar la situación y ver qué extremos de la información tienen que ser revisados o analizados". Así lo señaló el martes su presidente, Rodrigo Buenaventura, en una comparecencia ante los medios en la que también defendió la decisión de no suspender la cotización de Grifols.

“Nos hemos puesto en contacto con la compañía, vamos a esclarecer esta situación, no les quepa ninguna duda”, añadió. Por su parte, el consejero delegado de Bolsas y Mercados Españoles (BME), Javier Hernani, pidió “transparencia e información” para ver si la información publicada es real. El máximo responsable del gestor bursátil español remarcó que "todavía es muy pronto para sacar ninguna conclusión".

Qué paso con Gowex

No es la primera vez que Gotham City pone su punto de mira en una empresa española. Ya lo hizo con Gowex, hace ahora diez años. Fue en 2014 cuando puso contra la cuerdas a la empresa proveedora de wifi tras denunciar que el 90% de sus ingresos eran falsos y que el valor de la compañía era cero.

Su efecto fue fulminante. Las acciones de Gowex, que cotizaban entonces en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) -ahora BME Growth- se desplomaron y tuvieron que ser suspendidas de negociación. Días más tarde su presidente, Jenaro García, confesó ante el juez haber falseado las cuentas durante, al menos, los últimos 4 años, es decir, desde que empezó a cotizar en bolsa.

La compañía tecnológica tuvo que pedir el concurso de acreedores en 2015 y la Audiencia Nacional abrió un procedimiento penal contra sus gestores que aún no se ha resuelto. La Fiscalía Anticorrupción pedía 18 años de prisión por varios delitos, entre ellos el de fraude a inversores.

La singular irrupción de la hasta entonces desconocida firma de análisis llevó a la CNMV a iniciar una investigación para averiguar si su informe podía constituir un supuesto abuso de mercado, tal y como recuerda la agencia Efe. Junto a ello, BME pidió a la firma detallar con exactitud el origen y el alcance de esta información, tanto para ella como para sus accionistas.

La debilidad de la farmacéutica

Lo cierto es que el 'ataque' (por denominarlo de alguna manera) de Gotham a Grifols tiene lugar en uno de los mayores momentos de debilidad de la compañía, después de convertirse en el principal gigante de productos relacionados con la sangre, es decir, de los hemoderivados.

Se trata de una posición que la empresa ha construido durante la década pasada, sobre todo tras la compra y fusión con Talecris, otra compañía dedicada a los derivados del plasma que le permitió escalar al liderazgo.

De EEUU a China

Desde entonces, los esfuerzos de la farmacéutica se han destinado a fortalecer su posición en Estados Unidos, con constantes compras de activos, y el asalto al mercado asiático.

Sin embargo, los negocios en China menguaron y los resultados de Grifols se han comenzado a resentir tras la irrupción de la Covid y la crisis económica que generó.

Cambios de gobernanza

En paralelo a esta pérdida de resultados, la familia Grífols ha tratado de profesionalizar y poner a directivos ajenos al clan catalán al frente de la multinacional.

Los resultados de esta iniciativa han sido irregulares. Víctor Grífols dejó de ser presidente en 2022 y Steven F. Mayer, primer presidente ejecutivo de la compañía ajeno a la familia, abandonó el cargo cuatro meses después de ser nombrado.

Glanzmann, al frente

Por su parte, Víctor Grífols Deu y Raimon Grífols cedieron sus poderes como CEOs a Thomas Glanzmann, también presidente ejecutivo de la compañía tras la dimisión de Mayer.

Pero Mayer, antes de irse, dejó un legado: una estrategia a largo plazo para recortar costes que conlleva el despido de unos 2.300 trabajadores, la mayoría en Estados Unidos.

Pese a que esta iniciativa ha gustado a los mercados (igual que la venta de la participación que la multinacional tiene en Shanghái Rass), lo cierto es que el cambio de gobernanza se ha traducido, por ahora, en pérdidas en 2023. Lo cual ha dejado un flanco de la farmacéutica abierto para el ataque 'gothamita'.