El Ibex 35 ha cerrado su segunda semana consecutiva en negativo. El índice nacional ha acumulado un descenso del 1,11% en las últimas cinco jornadas, a la espera de que en los próximos días los miembros del Banco Central Europeo (BCE), la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) y el Banco de Inglaterra (BOE, por sus siglas en inglés) vuelvan a subir los tipos de interés.

A pesar del descenso semanal, el Ibex 35 ha terminado el viernes al alza. La subida ha sido del 0,78%, suficiente para alcanzar los 8.289,2 puntos. Ha logrado, por tanto, frenar una racha de cinco jornadas consecutivas en rojo, su mayor periodo de caídas diarias desde principios de octubre.

La mayoría de valores del selectivo han registrado ganancias en esta sesión, siendo las más abultaas las de Amadeus (4,53%), Grifols (2,12%) y Meliá (1,67%). Por el contrario, las mayores pérdidas han sido las de IAG (0,61%), PharmaMar (0,34%) y Rovi (0,33%).

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Las bolsas europeas también han puesto un broche positivo a una semana de descensos. Los índices del Viejo Continente han seguido la estela dejada por los principales mercados bursátiles asiáticos, que han cerrado en su mayoría al alza, obviando los datos publicados en China.

El índice de precios al consumidor (IPC), principal indicador de la inflación en China, ralentizó su avance hasta el 1,6% interanual en noviembre mientras el índice de precios a la producción (IPP), que mide los precios industriales, cayó un 1,3% por segundo mes consecutivo.

"Entre los inversores se está extendiendo la idea de que el cambio radical que han adoptado las autoridades chinas en su estrategia para combatir la Covid-19, acelerando el proceso de reapertura, va a provocar un fuerte incremento de casos en las próximas semanas, lo que lastrará el crecimiento económico del país a corto plazo", explican los analistas de Link Securities.

Así, se espera que China tarde todavía unos meses en adaptar su sociedad y su economía a convivir con el virus, tal y como ya han hecho la gran mayoría de los países. "A medio y largo plazo el cambio de estrategia era absolutamente necesario", subrayan los mismos expertos.

Inflación

Las bolsas europeas también se beneficiaban del cambio de tendencia en Wall Street. Los principales índices de la Bolsa de Nueva York habían iniciado el día en negativo tras conocerse que la inflación mayorista de Estados Unidos se redujo menos de lo esperado en noviembre.

Exactamente, el índice de precios al productor (IPP) se situó en el 7,4% en tasa anual, frente al 8,1% del mes anterior. Excluyendo los componentes volátiles de alimentos, energía y servicios comerciales, el IPP subyacente se moderó al 4,9%, tras alcanzar el 5,4% en octubre.

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Por otro lado, también en Estados Unidos se ha conocido que la confianza de los consumidores ha mejorado en diciembre tras las recientes subidas del mercado bursátil, mientras que las expectativas de inflación bajaron a un mínimo de 15 meses.

Los datos conocidos este viernes se han sumado al incremento de solicitudes de subsidio por desempleo en Estados Unidos la semana pasada, hasta las 230.000, en comparación con las 226.000 registradas la anterior.

El dato fue bien recibido por algunos inversores, que consideran que el deterioro del mercado laboral estadounidense es positivo para la renta variable, ya que éste es uno de los principales objetivos que persigue la Reserva Federal (Fed) con su proceso de retirada de estímulos monetarios.

Todas estas cifras son un anticipo del IPC de Estados Unidos que se conocerá el próximo martes 13 de diciembre y donde el consenso descuenta una nueva moderación en tasa general hasta el 7,3% -frente al 7,7% anterior y el máximo de 9,1% registrado en junio-. Asimismo, se espera que la tasa subyacente se reduzca hasta el 6,1%, desde el 6,3% anterior y el máximo del 6,6% de septiembre.

La Fed, el BCE y el BoE

"Estas referencias serán relevantes para la decisión de la Fed del miércoles 14 de diciembre, teniendo en cuenta que el mercado descuenta una moderación en el ritmo de subidas de tipos (de 50 puntos básicos desde los 75 de las últimas cuatro reuniones) a pesar del sólido informe oficial de empleo de noviembre", indican los analistas de Renta 4.

Tras la cita del banco central estadounidense, el próximo jueves, llegará el turno del BCE y del Banco de Inglaterra.

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El petróleo Brent subía un 0,98%, hasta los 76,95 dólares por barril. El crudo europeo tocó el jueves mínimos del año (75,74 dólares por barril) y, a pesar de que recuperó algo de terreno al final del día, cerró en negativo por quinta sesión consecutiva.

A pesar del repunte de este viernes, el Brent ha perdido esta semana más de un 10% de su valor. Se ha tratado de la mayor caída semanal registrada desde mediados de agosto y ha estado favorecida por las perspectivas de que la ralentización económica global repercutirá en la demanda de crudo.

El mercado mantiene al mismo tiempo su atención en las eventuales consecuencias en el nivel de oferta del tope de precio a las exportaciones de petróleo rusas que han impuesto esta semana en los países del G7, la Unión Europea y Australia.

El euro cedía terreno frente al dólar y se intercambia a 1,054 ‘billetes verdes’.

La rentabilidad del bono español a 10 años repuntaba al 2,939%, mientras que la prima de riesgo alcanzaba los 101,45 puntos básicos.