Las bolsas sufren con el dato de inflación de Estados Unidos del mes de agosto. La moderación de los precios, inferior a la estimada por los analistas, ha aumentado las posibilidades de que la Reserva Federal (Fed) suba los tipos de interés 75 puntos básicos por tercera reunión consecutiva.
En este cotexto, el Ibex 35 ha terminado el día con un descenso del 1,59%, en los 8.064 puntos. Con la mayor caída desde mediados de julio, el índice nacional ha puesto punto final a una racha positiva que se ha extendido durante cuatro jornadas.
El Ibex 35 había abierto la sesión al alza y se había mantenido en 'verde' tras conocerse que en España, el Índice de Precios de Consumo (IPC) moderó su tasa interanual tres décimas, hasta el 10,5%.
Pero el IPC estadounidense ha cambiado la tendencia de las bolsas europeas. Y las caídas registradas por Wall Street tras el toque de campana en el parqué neoyorquino han propiciado que los descensos se ampliaran.
Exactamente, las pérdidas de los índices europeos se han situado entre el 1,2% y el 1,6%. Al término de la jornada en el Viejo Continente, los descensos al otro lado del Atlántico también se aceleraban. El Dow Jones bajaba un 2,67%; el S&P 500, un 3,10% y el Nasdaq, un 4%.
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La inflación de Estados Unidos volvió a bajar en agosto, por segundo mes consecutivo, y situó su tasa interanual en el 8,3%, dos décimas menos que en julio. Según los datos publicados este martes por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS), los precios subieron una décima respecto al mes anterior, después de haberse mantenido estables en julio.
Las previsiones apuntaban a una nueva moderación de la tasa interanual, hasta el 8,1% y que los precios se redujeran una décima respecto a julio. Tras estos datos, se han incrementado las apuestas por una tercera subida de tipos de 75 puntos básicos por parte de la Fed.
Según una encuesta elaborada por Reuters, los economistas esperan que la Fed ejecute otro aumento de 75 puntos básicos. De la misma manera, los inversores dan una probabilidad del 87% a un incremento de tres cuartos de punto.
Los expertos ya avisaban a primera hora de la mañana que cualquier lectura mejor de lo esperado será muy bien recibida por los mercados, que podrían consolidar sus recientes avances.
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En sentido contrario, alertaban de que una inflación por encima podría provocar algunas tomas de beneficios tanto en la bolsa estadounidense como en las europeas, tal y como ha sucedido sucediendo.
El euro también se ha girado a la baja, ya a punto de perder la paridad frente al dólar de nuevo. El lunes la divisa única alcanzó máximos desde mediados de agosto gracias a la determinación del Banco Central Europeo (BCE) en lo que a subida de tipos de interés se refiere.
La entidad europea insistió el lunes en que va a subir más sus tipos de interés, que están ahora en el 1,25%, después de que los incrementara el jueves pasado en tres cuartos de punto porcentual, la mayor subida de su historia.
Así lo señaló la miembro del comité ejecutivo del BCE Isabel Schnabel. Según indicó, los miembros de la institución esperan "subir más las tasas de interés hasta niveles que aseguren que la inflación vuelve a tiempo" al objetivo a medio plazo del 2%.
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Al término de la sesión para las bolsas europeas, el petróleo Brent bajaba un 1,44%, hasta los 92,65 dólares por barril. Tras caer la semana pasada a niveles previos a la guerra en Ucrania, el crudo había vuelto a repuntar en las últimas sesiones.
Menores perspectivas de que el petróleo iraní regrese al mercado a corto plazo, junto con una caída de los precios del gas, que rebaja el temor a una recesión global y un frenazo de la demanda de petróleo, han contribuido a elevar su cotización.
El precio del gas intentaba cortar su tendencia a la baja, iniciada tras los máximos históricos alcanzados hace tres semanas. El gas natural TTF sumaba un 5,98% en el mercado holandés, hasta los 202 euros por megavatio hora (Mwh).
Mientras la crisis energética se agrava en Europa tras el cierre indefinido del gasoducto Nord Stream hace casi dos semanas, Bruselas estudia junto a los Veintisiete cómo abordar la reforma del mercado eléctrico. Medidas como gravar los beneficios extraordinarios de las energéticas van cogiendo fuerza tras la reunión del pasado viernes.
El propio BCE alertó la semana pasada en sus previsiones de que el continente entraría en recesión en 2023 si Rusia cerrase por completo el suministro de gas.
La rentabilidad del bono español a 10 años se reducía al 2,84%, mientras la prima de riesgo española baja hasta los 112,75 puntos básicos.
