Tensión en Wall Street. Los principales índices de la Bolsa de Nueva York iniciaban la sesión del viernes divididos entre subidas y caídas, aunque con leves movimientos, a la espera de que el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), Jerome Powell, tome la palabra en la cumbre de banqueros centrales de Jackson Hole.

El discurso de Powell será analizado en busca de indicios de que la desaceleración económica pueda alterar su rumbo de endurecimiento de la política monetaria. Los inversores esperan cualquier pista de en qué cuantía subirá sus tipos en septiembre.

En la sesión inaugural de Jackson Hole, los miembros de la institución que hicieron comentarios no se pronunciaron al respecto, pero reiteraron que subirán las tasas de referencia y que las mantendrán en niveles elevados hasta cerciorarse de que la inflación se dirige al 2%.

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Ese es el objetivo fijado por la Fed. El deflactor del consumo privado general (PCE, por sus siglas en inglés) -el indicador favorito del banco central estadounidense para medir la inflación- bajó en julio al 6,3% en tasa interanual, cinco décimas menos que en junio.

El mercado da una probabilidad ligeramente superior a que la siguiente subida de tipos que acometa la Fed sea de 75 puntos básicos. La opinión es contraria a la de economistas y expertos, que anticipan una subida de 50 puntos básicos.

Con este panorama, tras el toque de campana al otro lado del Atlántico, el Dow Jones subía un 0,13% y alcanzaba los 33.344,69 puntos.

3M encabezaba las ganancias del indicador al revalorizarse un 1,11%. A continuación, Dow subía un 1,01% y Boeing, un 0,87%. Por el contrario, las mayores caídas eran las de Cisco (0,38%), Amgen (0,31%) y Visa (0,27%).

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Frente a la ligera subida del Dow Jones, el S&P 500 cedía un 0,05%, hasta los 4.196,58 puntos, y el Nasdaq restaba un 0,14%, hasta los 12.632.09 enteros.

Las subidas de tipos que desde marzo acomete la Fed -los ha incrementado 225 puntos en cinco meses- y las expectativas de una desaceleración económica lastraron la evolución del parqué neoyorquino durante la primera parte del año.

Sin embargo, desde los mínimos que registraron en junio, los principales índices de Wall Street han rebotado con fuerza. El S&P 500 ya ha recuperado la mitad de las pérdidas que acumulaba en el ejercicio gracias a que los resultados empresariales fueron mejor de lo esperado. A ellos se sumó la posibilidad de que la inflación hubiese tocado techo en Estados Unidos.

La tasa interanual de inflación en Estados Unidos se moderó en julio hasta situarse en el 8,5% gracias a una ralentización en los precios de la energía y, concretamente, del coste de la gasolina y el gas natural.

Mientras que la inflación se moderó, la caída de la economía estadounidense se redujo. Entre abril y junio, el producto interior bruto (PIB) de Estados Unidos se contrajo un 0,1% en comparación con los tres meses anteriores. El descenso es una décima inferior al anticipado en la primera lectura del dato.