Las dudas sobre los éxitos sanitarios en torno a una vacuna contra el coronavirus ha levantado la suspicacia de los inversores. Wall Street ha cerrado con tono mixto la sesión del jueves pese a que han intentado aferrarse a la progresiva reducción en el número de nuevos parados para leer en positivo la cifra semanal de desempleo, de manera que los grandes índices neoyorquinos extienden las alzas este jueves.

Aunque llueve sobre mojado en EEUU, que ya suma 26,2 millones de ciudadanos en desempleo desde la llegada del coronavirus a su territorio, el hecho de que esta semana solo se hayan sumado a las listas del paro 4,427 millones de estadounidenses da motivos para seguir pensando que lo peor en este aspecto podría haber pasado ya para la primera economía del mundo.

Con estas premisas, el Dow Jones ha sumado un 0,17% para acercarse a los 23.515 puntos. El S&P 500 se ha dejado un tímido 0,05% en los 2.800 puntos con subidas del 1%. Plano también ha cerrado el Nasdaq, que acaricia los 8.495 puntos.

Dato de paro

Si la semana pasada la cifra de desempleados ya era tan abultada que borraba toda la creación de empleo producida desde la quiebra de Lehman Brothers en 2008, ahora se entra ya en terreno negativo. Este último dato deja el promedio de las últimas cuatro semanas en 5,79 millones de peticiones de subsidio. Además, aunque los inversores prefieren mirar el lado amable del nuevo dato, se vuelve a superar la previsión de consenso de los economistas, que no aguardaban más de 4,2 millones de parados en la última semana.

La del mercado laboral no es la única cifra macro que la continuidad alcista de los índices pasa por alto. Como pasaba en Europa, los índices PMI han mostrado datos peores de lo esperado tanto en manufacturas (36,9 puntos) como en servicios (27 puntos). Algunos gestores defienden que estos números, a pesar de superar los pronósticos de los economistas, son más llevaderos que los que se habían descontado ya en algunos modelos de valoración de inversiones.

Asia, esperanza para los casinos

En el terreno corporativo, una de las compañías que se sitúa en el foco es la farmacéutica Eli Lilly & Co. Sus títulos suben cerca de un 2,23% después de haber publicado un beneficio mejor de lo esperado. Su beneficio por acción es de 1,75 dólares, por encima de los 1,48 que preveían los analistas. Además, la publicación de previsiones de negocio para el conjunto del año en un momento en el que muchas cotizadas están retirando estas guías impulsan su cotización.

Las acciones de Las Vegas Sands, la empresa de casinos que promovió el fallido Eurovegas de Madrid, sube con fuerza, hasta un 12,15% en Wall Street después de que sus responsables hayan anunciado una "rápida" recuperación de negocio en Asia, donde la epidemia del coronavirus parece bastante más acotada que en otros lugares del mundo. 

El retroceso llega para Snap, la compañía dueña de la red social Snapchat, después de las subidas del jueves. Sus acciones se dejan más de un 5,5% después de haber anunciado una oferta pública de venta de bonos convertibles sénior por 750 millones de dólares que abren la puerta a una drástica dilución de los actuales accionistas de la tecnológica.