Las bolsas europeas se han teñido de rojo este viernes. Y el Ibex 35 no ha sido ninguna excepción, con lo que no ha podido poner el broche de oro a su primera semana alcista de mayo y la mejor desde principios de abril. A pesar de que al cierre de esta sesión ha caído un 0,26% hasta los 9.280,1 puntos, desde el lunes se apunta una subida del 1,78%. La ansiada cota del 9.300 se le ha terminado resistiendo a un selectivo que ha roto con tres semanas consecutivas en descenso.

El principal bálsamo para amortiguar las pérdidas por las que la bolsa española se decantaba desde primera hora ha llegado desde Washington. La Casa Blanca ha confirmado que dará 180 días de moratoria antes de aplicar aranceles a vehículos procedentes de Europa y Japón, lo que los analistas han entendido como un gesto de acercamiento y alto el fuego de parte de la administración Trump. El mal trago ha llegado desde Pekín, pues varios observadores apuntan a que ahora es China quien más impedimentos está poneniendo para el establecimiento de una paz comercial duradera con EEUU.

Al fondo de la tabla de revalorizaciones, dos de las compañías que más expuestas están a la evolución del comercio mundial. ArcelorMittal (-3,71%) y Acerinox (-1,34%) han sido las más penalizadas de todo el índice.

Cerca del retroceso de la segunda se han quedado Inditex (-1,28%), Bankia (-1,23%) y Aena (-0,8%). El banco heredero de Caja Madrid ha encajado así el anuncio realizado ayer de emitir 5.000 millones para cumplir sus requisitos de capital.

La automovilística Cie Automotive ha logrado amortiguar su descenso hasta el 0,8% que se ha dejado al cierre, por encima del 0,5% que ha perdido su compañera de sector Gestamp, en el Mercado Continuo. Allí, fuera del Ibex 35, Dia ha encajado con caídas del 4% la definitiva toma de control del ruso Mijail Fridman.

Al otro extremo de la tabla, Indra ha sido el valor más pujante con una revalorización del 1,81% hasta los 9,83 euros por acción. Grifols (+1,3%) y Meliá Hotels (+1,1%) han completado el podio. Ferrovial, que ha anunciado el traslado de su filial Ferroglobe a Madrid para evitar impactos de un eventual Brexit duro, ha subido un 1% hasta los 21,3 euros por título.

En el mercado secundario de deuda, el bono español a diez años ha descendido hasta mínimos históricos de rentabilidad en el 0,85% en los cruces más amables de la sesión. Con esta marca, ha rebasado con creces la cota que hasta ahora marcaba su menor rendimiento: el 0,878% de septiembre del año 2015. Después, se ha producido un ligero incremento hasta el 0,88% que frente al -0,1% del bund alemán resulta en una prima de 99 puntos básicos.