El Ibex se salta el guion escrito desde que existe como índice bursátil. Este lunes, el selectivo español ha logrado esquivar las caídas con las que siempre ha recibido a los vencedores de las urnas tras unas Elecciones Generales y ha saludado a Pedro Sánchez con alzas del 0,12% hasta los 9.517,2 puntos. Además de romper el maleficio, ha consolidado con holgura los 9.500 puntos y otras marcas inferiores que los analistas consideran claves para apuntalar el recorrido alcista de la entidad.

A primera hora, el descenso llegaba al 0,7% y luego se ha ampliado hasta rozar el 1% en algunos compases de la sesión. Sin embargo, los avances de la banca han logrado lo insólito para el Ibex. Su gráfica ha terminado saludando al alza la victoria de Pedro Sánchez al alza a pesar de que aún no está claro quiénes serán sus compañeros de viaje para esta próxima legislatura.

El protagonismo dentro del sector ha sido para Bankia que se ha puesto al frente del indicador con un alza del 2,9% tras presentar sus resultados del primer trimestre. Según estas cuentas, el beneficio ha sido un 10,8% inferior al del año pasado, hasta los 205 millones de euros, pero se han batido las previsiones de consenso. Además, su consejero delegado, José Sevilla, ha señalado que lo lógico es que el nuevo Gobierno mantenga el objetivo de desinvertir en la entidad en lo sucesivo.

Muy de cerca han seguido CaixaBank (+2,8%) y el Sabadell (+2,6%), que ha recuperado el euro por acción. Santander, que publica sus cuentas trimestrales mañana martes, ha ganado un 2,2% y Bankinter se ha quedado en el 1,7% al alza. BBVA, que ha dado cuenta de la marcha de su negocio al cierre del mercado, se ha conformado con ganancias del 0,7%. El presidido por Carlos Torres ha anunciado un beneficio beneficio un 9,8% inferior al de hace un año por el impacto de EEUU y Turquía.

Otros pesos pesados del selectivo como Telefónica (+0,6%), ArcelorMittal (+0,6%) e IAG (+2,2%) también han contribuido al cierre en verde del índice. La aerolínea ha tenido sus principales motores en una mejora de recomendación de UBS y la caída del precio del crudo tras las cotas récord de medio año alcanzadas en las últimas semanas. Repsol ha encajado este viaje de regreso del petróleo en tablas al repetir el cierre del viernes pasado en 14,745 euros.

LAS ELÉCTRICAS DAN LA SORPRESA

El lado menos amable del triunfo electoral de Sánchez se ha dibujado en el castigo a Ence y las eléctricas. La papelera ha retrocedido un abultado 4,78% hasta los 4,77 euros por acción. Mientras tanto, la posibilidad de que se meta mano a la factura energética de los ciudadanos ha conllevado caídas del 1,4% para Iberdrola, del 0,8% para Endesa y del 0,6% para Naturgy.

A pesar de estos descensos, el índice se ha librado de perpetuar el mantra de que los 'lunes electorales' siempre son bajistas. Hasta hoy, el Ibex había vivido ocho elecciones generales y siempre había caído. Sus peores registros los logró en 1996 cuando Aznar desalojó a González de La Moncloa, que cayó un 5,2%, y en 2004, año que le dio el triunfo a José Luis Rodríguez Zapatero y que fue respondido por el Ibex con una caída del 4,1%.

Unos cuantos años después llegamos a este 29 de abril de 2019 con un presidente socialista, en funciones, que tendrá no solo un reto político importante, el de formar un gobierno estable y consistente en medio de un Congreso muy fragmentado, sino el de gestionar el enfriamiento económico. Para 2019 los pronósticos de crecimiento del PIB contemplan un crecimiento ligeramente superior al 2%, para situarse por debajo de esta cota en 2020.