El verde del cierre de este martes ha sido más el resultado de un esprín de última hora que de una carrera de fondo, aunque el Ibex 35 ha vuelto a salvar por tercera sesión consecutiva los 9.200 puntos. El índice español ha marcado su último cruce con alzas del 0,25% hasta los 9.227,2 puntos. Después de buena parte de la sesión en rojo, ha sido capaz de anotarse nuevos máximos de cuatro meses a pesar de que las incertidumbres de fondo siguen sin resolverse.

La incertidumbre del Brexit se ha tornado en calma cuando se ha conocido que por primera vez la primera ministra británica Theresa May baraja un plan para retrasar la desconexión con Bruselas más allá del 29 de marzo, fecha oficial fijada en todos los calendarios para la ruptura entre Reino Unido y sus todavía socios comunitarios. Además, el líder laborista Jeremy Corbyn ha cedido a las presiones para mostrarse a favor de un segundo referéndum, lo que igualmente diluye las probabilidades de un Brexit duro

Este giro de los acontecimientos en Londres ha ayudado a decantarse por el verde en la recta final de la sesión a un nutrido grupo de valores, includos varios financieros. Sin embargo, la gran protagonista de la sesión ha sido Inditex. La gigante textil gallega se ha apuntado alzas del 2,9%, hasta superar por 23 céntimos los 26 euros por acción, una cota que no visitaba desde mediados del pasado diciembre.

El grupo de valores más alcistas se ha mantenido durante casi toda la sesión. Grifols ha subido un 2,8% ante las señales de distensión comercial entre China y EEUU. Viscofan ha repuntado un 1,8% y Aena ha remontado un 1,2%.

Iberdrola ha logrado aguantar prácticamente plana (-0,03%) tras haber desvelado su estrategia hasta el año 2022. La eléctrica espera obtener un beneficio neto de entre 3.700 y 3.900 millones de euros para entonces, lo que supondría un ascenso del 30% con respecto a las cifras del ejercicio 2018 recién publicadas. Además, la hoja de ruta contempla un resultado bruto de explotación (ebitda) de más de 12.000 millones.

El lado amargo de las últimas novedades del Brexit también se ha dejado sentir en la parrilla de valores del Ibex 35. El holding hispano-británico de aerolíneas IAG se ha descolgado al fondo del índice con un sonoro retroceso del 3,3% que ha condenado a sus acciones a abandonar la cota de los 7,2 euros por acción. En este caso, el castigo se ha acelerado por la próxima expulsión del valor del índice MSCI España por su veto a la entrada de accionistas extracomunitarios.

Junto a la matriz de Iberia y British Airways, también han caído con fuerza pero a distancia las acciones de Mediaset España (-1,5%), Telefónica (-1,4%) y ArcelorMittal (-1,2%).

Por el mercado secundario de deuda soberana, la prima de riesgo sigue aflojando hasta los 103 puntos básicos. Los bonos españoles marcan una rentabilidad del 1,15% frente al 0,12% del 'bund' alemán de referencia. Se estrecha el diferencial mientras que la ministra de Economía ha anunciado que el Tesoro Público español ha lanzado una emisión sindicada de deuda a quince años cuya demanda por parte de los inversores ha superado los 25.000 millones de euros.