La insistencia de la Reserva Federal en volver a subir tipos antes de que acabe el año choca con el informe del Tesoro que habla de manipulación de divisas en China. 

Esto unido a la preocupación de un menor crecimiento global ha provocado caídas en los tres principales índices de Wall Street. El Dow Jones ha perdido un 1,3% hasta los 25.379 puntos. Un 1,4% se ha dejado el agregado S&P 500, que marca 2.768 puntos. El tecnológico Nasdaq amplía caídas del 2% hasta los 7.485 puntos.

Los inversores siguen escrutando las actas de la Reserva Federal (Fed) y el informe semestral del Tesoro. En ambos encuentran argumentos para tirar a la baja de los índices de referencia de Wall Street. La persistencia en el calendario de subidas de tipos y el temor a la manipulación del mercado de divisas en China en plena guerra comercial con Pekín no suponen una buena combinación para la invertir y facturar en dólares.

Por la pasarela de resultados desfila la firma de inversión Blackstone. El valor de su cartera de activos se ha incrementado un 7,9% en el tercer trimestre del año, por encima de la revalorización del S&P 500. Sus beneficios han alcanzado los 442,7 millones de dólares, lo que se traduce en 64 centavos por acción frente a los 55 centavos de hace un año. A pesar de estas cifras, el castigo se amplía a sus acciones, un 2,2% a la baja.

Las cuentas del tercer trimestre de Alcoa, la metalúrgica que durante años inauguró la temporada de resultados en Wall Street, sí regalan el verde a su cotización, con alzas próximas al 5,8%. El grupo estadounidense, uno de los mayores productores de aluminio del mundo que esta semana ha anunciado el cierre de dos de sus tres plantas en España, perdió 41 millones de dólares en el tercer trimestre, frente al beneficio de 113 millones de dólares obtenido en igual periodo de 2017.

Los inversores también se fijan en dos compañías que reciben cambios de consejo inversor. Nike se gira al rojo con caídas del 1,2% a pesar de que los analistas de Oppenheimer hayan elevado recomendación a sobreponderar desde igual a mercado y precio objetivo hasta los 90 dólares por acción, lo que implica un potencial alcista del 18%. Alphabet, la matriz de Google, se deja un 2,5% a pesar de que la firma Webush haya marcado también con sobreponderar sus acciones, para las que fija un techo de 1.350 dólares.

Starbucks abandona las tímidas ganancias de la apertura para retroceder un 0,8% en el parqué neoyorquino gracias al anuncio de que licenciará sus operaciones en Francia, Bélgica, Holanda y Luxemburgo a la firma mexicana Alsea, antiguo socio de la cadena de cafeterías en los mercados latinoamericanos. La compañía azteca tendrá plenas facultades para operar y abrir y cerrar establecimientos de la marca estadounidense en estos países europeos.

El ámbito macroeconómico, pasa a un segundo plano y no es capaz de insuflar ánimo alcista a pesar de su buen tono. Las peticiones semanales de subsidio al desempleo han vuelto a colocarse bajo el foco de los inversores. Las 210.000 nuevas solicitudes registradas se quedan por debajo de la previsión de los analistas, lo que rebaja la cifra de parados a 1,64 millones de personas, menos de lo que apuntaban los pronósticos y de nuevo en línea con mínimos de los últimos 50 años.

El índice de actividad manufacturera de la Fed de Filadelfia también pasa el escrutinio del mercado, pues ha alcanzado 22,2 puntos en octubre, holgadamente por encima de los 19,7 puntos que aguardaba el consenso de expertos.