Porque sólo tres, incluyendo ya al de Manacor, pueden 'presumir' de haber ganado más de 100 millones de dólares en premios. Es decir, con sus triunfos dentro de la cancha, indiferentemente de sus negocios o actividades comerciales fuera de ella. Y son, precisamente, los tres tenistas que han dominado el circuito desde 2003.

El primero en romper el umbral de los 100 millones fue el serbio Novak Djokovic, allá por junio de 2016, y también durante el transcurso del Roland Garros de aquel año. Actualmente, su cuenta de ganancias en premios alcanza los 110,9 millones de dólares, según los datos de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP). Con 31 años y 68 títulos en sus vitrinas, incluidos 12 Grand Slams, Djokovic está intentando superar los problemas en su codo derecho para 'engordar' aún más sus estadísticas.

El segundo en superar esa redonda cifra fue el suizo Roger Federer. Lo logró a comienzos de 2017, tras su inesperado e histórico triunfo en el Open de Australia. Las posteriores victorias en Wimbledon y este año de nuevo en Australia, sumadas a otros triunfos, propician que sus ganancias se hayan estirado hasta los 116 millones de dólares. Numero dos del ranking, encara ahora su superficie favorita, la hierba, con la aspiración de reeditar su victoria en el All England Club de Londres y sumar otro grande a los 20 que ya atesora.

Y el tercero es ya Rafael Nadal, incrustado en el club de quienes han traspasado la frontera de los 100 millones en ganancias tras su extraordinario undécimo Roland Garros. Primero en el ranking ATP, con 32 años y 17 grandes a sus espaldas, alcanza los 100,5 millones en premios y su incomparable talla como competidor ampliará todavía más esa cifra con toda seguridad.

Para tomar perspectiva acerca de cómo estos tres jugadores han dominado el circuito en los últimos años, el 'cuarto' en discordia, el escocés Andy Murray, suma 60,8 millones en premios y tres títulos de Grand Slam. Y el también suizo Stan Wawrinka, ganador igualmente de tres grandes, cuenta 31 millones en premios.