El Dow Jones engorda sus 25.000 con alzas del 0,4% que llevan su gráfica a superar los 25.240 puntos. El agregado S&P 500,  se queda en 2.770 puntos tras un cierre en rojo muy tímido. El tecnológico Nasdaq se queda rezagado después de tres jornadas de máximos, y el indicador cae un 0,7% hasta los 7.635 puntos.

La referencia semanal de peticiones de subsidio al desempleo ha sido la clave macroeconómica del día. Se han renovado 1,74 millones de solicitudes de ayuda, con lo que se supera ligeramente la cota prevista por los analistas y se rebasa la cota de la semana anterior. Sin embargo, las nuevas peticiones han caído hasta las 222.000, cifra que implica 1.000 personas menos que hace un mes.

Con Wall Street ya abierto la negociación ha llegado la confianza del consumidor de Bloomberg, que se quedó en 55,2 puntos de la semana previa.

Los bancos repiten como protagonistas de la sesión a la espera de las reuniones de la Reserva Federal y el Banco Central Europeo (BCE) la semana que viene. El ascenso de las entidades financieras en Wall Street es consecuencia de la subida de rentabilidad de los bonos, que empiezan a descontar un más próximo cierre de estímulos en el Viejo Continente, lo que aliviaría sus márgenes de negocio y aportaría mayor rendimiento a sus carteras de deuda soberana. JP Morgan (+0,4%), Bank of America (+0,1%) y Morgan Stanley (+0,4%) se decantan por las ganancias.

Sin embargo, el empuje del sector podría no ser hoy suficiente con la caída que experimentan las tecnológicas. Después de cotizar en máximos, valores como Facebook o Microsoft se dejan un 1,6%. También Alphabet (Google) o Intel se sitúan entre los más bajistas.

La gigante china del comercio online Alibaba sufre caídas del 2,3% a pesar de haber recibido impulso de los analistas de Susquehanna, que han elevado el precio objetivo de la tecnológica hasta los 305 dólares por acción. Anteriormente, el techo lo fijaban en 220 dólares. La nueva cota convierte a esta casa de inversión en la de visión más alcista para la cotizada de todas las que rastrea FactSet.

AT&T logró cerrar un 1,3% arriba, después de haber sufrido el recorte de Jefferies hasta mantener desde comprar. En este caso, los argumentos que se emplean pasan por la ¿continuidad de las presiones en el segmento de entretenimiento¿ mientras los operadores multicanal ganan cuota de mercado y restringen los márgenes de las operadoras.

Las órdenes de venta se imponen en Ralph Lauren, que baja un 1,3% a pesar de que la compañía haya anunciado una subida del 25% en su dividendo al accionista y haya aportado otros 1.000 millones de dólares a su programa de recompra de títulos propios. Los inversores dan más peso a estas noticias que a la que prevé hasta 150 millones de dólares más por costes de reestructuración al consolidar su red de distribución y de oficinas centrales a la matriz del grupo. La marca textil aguarda que esta reorganización se traduzca en un ahorro anual de hasta 80 millones.