BBVA ha recibido en los últimos día propuestas vinculantes de tres fondos para quedarse el Proyecto Jaipur, según publica hoy el diario Vozpopuli. Los tres candidatos a quedarse con esta cartera compuesta por 600 millones de euros en créditos impagados ligados a la promoción inmobiliaria son Apollo, Cerberus y Deutsche Bank, que habrían puesto sobre la mesa unos 200 millones. Se espera que la operación pueda cerrarse en junio.

Para los analistas de Ahorro Corporación, la operación encaja con la actual estrategia de la entidad que preside Francisco González de acelerar la desinversión de activos inmobiliarios. El objetivo es que la exposición al ladrillo sea inmaterial en 2018 frente a los 20.000 millones de euros en activos improductivos que actualmente posee el banco. La operación representa el 3,0% de la cartera improductiva actual.

Por otro lado, Fidentiis ha terminado el proceso de colocación privada acelerada entre inversores cualificados e institucionales del 7% del capital del Tubacex en manos de Cartera Industrial Rea por 30,25 millones de euros. La operación se ha efectuado a un precio de 3,25 euros por acción, lo que supone un descuento de casi el 3% respecto al precio al que cerraron ayer sus acciones.

Esta salida se produce tras dos años de fuertes pérdidas de Tubacex, y dentro de la estrategia actual de la compañía centrada en productos Premium, una mejora del posicionamiento comercial y la entrada en nuevos mercados. Tras la salida de Cartera Industrial Rea, los principales accionistas según CNMV de la compañía son José María Aristrain (11,00%), seguido de Ecofin (4,938%), Itzarri (3,215%), EDM (3,023%) y AZValor (3,003%).

En el terreno de las recomendaciones, los expertos de Credit Suisse han mejorado el precio objetivo de Amadeus a 45,86 euros desde los 43,3 euros anteriores. Pese a la mejora, la nueva valoración supone un potencial de retrocesos del 15,5% respecto al cierre de sus títulos ayer.

También Repsol es otro de los protagonistas de la jornada, después de que se haya adjudicado, en consorcio con la mexicana Sierra Perote, uno de los bloques en la licitación realizada por el Gobierno de México, que ponía en juego hasta 15 áreas para la exploración y extracción de hidrocarburos en aguas del Golfo de México.