Los Fondos Inmobiliarios ¿los dos grandes promovidos por Santander y BBVA- no aguantaron la crisis del sector y los bancos rápidamente se encargaron de desmontarlos. Nunca se supo claramente los motivos de esta desaparición que fue más traumática para sus partícipes en el caso del banco cántabro frente a la mayor generosidad del presidido por Francisco González. Temor a una estampida de inversores en un producto de muy baja liquidez, pero sobre todo las gestoras de los bancos mostraron poca paciencia¿ prefirieron quitarse el problema de encima.

Sin embargo, el inmobiliario es una inversión a largo plazo. Vivía la primera crisis fuerte del sector en España donde nunca había bajado la vivienda de forma nominal, aunque sí de forma real si se descontaban las espectaculares inflaciones de los años setenta y ochenta.

VIVIENDA Y BOLSA DURANTE LA CRISIS

Año

Rent, %

Mil euros

Vivienda

Bolsa

Vivienda

Bolsa

2016

4,70%

-2,01%

700,02

612,48

2015

3,60%

-7,15%

668,60

625,04

2014

0,30%

3,66%

645,36

673,18

2013

-10,60%

21,42%

643,43

649,41

2012

-13,70%

-4,66%

719,72

534,84

2011

-7,40%

-13,61%

833,98

560,99

2010

-2,00%

-17,43%

900,62

649,36

2009

-6,70%

29,84%

919,01

786,44

2008

-1,50%

-39,43%

985,00

605,7

Pero, ¿qué hubiera pasado de mantener esos fondos inmobiliarios frente a otras inversiones de riesgo como la Bolsa? De acuerdo con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre la evolución del precio de la vivienda, entre los años 2007 y 2016, comparados con la marcha del Ibex 35, el ahorrador perdería menos con un fondo inmobiliario que invirtiendo en Bolsa.

Mil euros colocados en a finales de 2007 en vivienda han terminado siendo 700,02 euros a cierre de 2016, lo que supone una caída del 30% en este periodo, tocando su nivel más bajo en 2013 cuando esos mil euros llegaron a convertirse en 643,43 euros por efecto de depreciación en el ladrillo.

Pero la cosa ha sido sustancialmente peor de mantener esa misma inversión en Bolsa durante los siete años duros de la crisis. Así, los mil euros terminaron el periodo reducidos a 612,48 euros, lo que supone una pérdida del 38,7%, casi nueve puntos más de pérdida que con los inmuebles. El punto más bajo en Bolsa se tocó en 2012, donde los mil euros invertidos en Ibex 35 llevaron a valor 534,84 euros, casi la mitad de la pérdida de la inversión.

Los fondos inmobiliarios hubieran vencido a la Bolsa en la profunda crisis de los mercados y las economías vividos durante estos años. Un dato que rompe mitos sobre la excesiva concentración del ahorro de los españoles en el ladrillo y la conveniencia de convertir gran parte en financiero. En situaciones de crisis, la vivienda ha vuelto a ganar¿ en este caso, a perder mucho menos.