Según revela el Informe Anual de Autoconsumo Fotovoltaico, presentado el lunes por APPA Renovables, aunque el autoconsumo generó 7.262 GWh el año pasado, podría haber producido unos 8.903 GWh. 

Si hacemos la conversión, se tiraron unos 1.642.000.000 kilovatios hora (kWh) de producción eléctrica por los problemas que tienen las grandes instalaciones para verter y comercializar sus excedentes.

[El autoconsumo en España se contrae por primera vez: la potencia instalada cae un 27% en 2023.]

Teniendo en cuenta que el consumo medio anual por hogar es de unos 3.500 kWh, se trata de una cantidad de electricidad capaz de abastecer a más de 471.000 hogares. Si asumimos además que cada hogar cuenta con una media de 2,5 habitantes, hablamos de 1.177.500 personas, cerca de la totalidad de la población de las Islas Baleares.

"En autoconsumo se están poniendo medidas para corregir este problema de excedentes. Por ejemplo, el Gobierno ha asegurado al autoconsumo el 10% de todos los nudos de la red de transporte de electricidad que someta a concurso. Esta reserva de capacidad tenía una vigencia de dos años, ahora se han ampliado otros dos", explicó el lunes José María González Moya, director general de APPA Renovables. 

Según el representante de la patronal renovable, estos cambios normativos "todavía tienen que llegar de forma efectiva al sector", lo que "permitirá reducir esos vertidos del 18%", señaló.

130 millones de euros

El informe de APPA Renovables alerta que el excedente de la generación eléctrica del autoconsumo debe ser bloqueado con sistemas anti-vertido. Los 1.642 GWh que se desperdiciaron en 2023, "con un precio del mercado eléctrico medio de 87,10 euros/MWh", tendrían un "valor estimado de 130 millones de euros".

En el ámbito de la burocracia, "debemos alzar la voz para facilitar el vertido de excedentes en las grandes instalaciones", defiende el análisis. "La práctica habitual de tramitar instalaciones con antivertido cuando, perfectamente, podrían estar generando electricidad renovable, limpia y distribuida, es algo que debemos corregir", añade.

Según la patronal renovable, desperdiciar esa electricidad, "cuando en 2022 invertimos 90.000 millones de euros en importaciones energéticas", es un "sinsentido".

Además, "cada kWh no aprovechado de instalaciones de autoconsumo ya existentes es un kWh que deberá ser producido con el mix energético actual en el que la mitad de su generación no es renovable", resalta el análisis.

Autoconsumo en cifras

Tras cuatro años de fuertes crecimientos, en los que la potencia anual instalada se había multiplicado por 26, en 2023 se ha producido la primera contracción en el ritmo instalador del autoconsumo: se instalaron cerca de 1.943 MW nuevos, un 27% menos respecto al récord marcado en 2022.

El autoconsumo alcanza así los 7.154 MW de potencia total en el país. La caída ha sido más acusada en el sector residencial (se instaló un 49% menos que en 2022) que en el industrial (un 13% menos) por la paulatina desaparición de las ayudas europeas, el encarecimiento de los tipos de interés y la moderación de los precios de la electricidad.

El autoconsumo colectivo sigue siendo tarea pendiente en España. Según un reciente estudio de Aldea Energy, Asturias, Barcelona y Navarra son las regiones que cuenta con un mayor número de suministros. 

En concreto, y según los datos de diciembre de 2023 que maneja la compañía, Asturias es la región que tiene el mayor número de autoconsumo colectivo superando las 3.200 suministros, seguida por Barcelona con más de 2.200, Navarra (1.748), Madrid (1.556) y Alicante (1.074).

Por el lado contrario, hay tres provincias que no cuentan con ninguna instalación de este tipo como es el caso de Lugo, Ourense y Segovia.