El comercio electrónico madura a pasos agigantados en España. El coronavirus ha potenciado las compras online y, con ello, ha acelerado los planes de algunas compañías como Inditex, que invertirá 1.000 millones para potenciar las ventas digitales. Su ejemplo no es el único, ya que sectores como el de la alimentación o el de los productos de ocio también han experimentado incrementos. 

Junto al calor del ecommerce crece la logística, la otra pata del negocio que hace realidad que toda esta maquinaria funcione. Y es justo aquí donde muchos de los players del sector están acelerando sus apuestas empujados por el aumento de ventas. 

El miércoles pasado, Amazon anunció que abrirá a principios de este otoño su segundo centro logístico en la Comunidad de Madrid, que estará ubicado en Alcalá de Henares y creará más de 500 empleos fijos en tres años. Este se sumará al centro robótico que la compañía pondrá en funcionamiento a lo largo de este año en la localidad sevillana de Dos Hermanas.

Justo un día después, entraba en funcionamiento el nuevo centro de Seur en Illescas (Toledo) con 37.000 m2. Este responde a la necesidad de la compañía ampliar su capacidad de almacenamiento en un 40% y mejorar la eficiencia de sus operaciones de Madrid.

Merlin Properties, uno de los principales actores logísticos de España, explica sobre estos dos nuevos centros logísticos que “han sido desarrollados o por el operador directamente (i.e Amazon) o llave en mano (i.e Seur), es decir, con una implicación de los operadores en el proyecto muy alta y por ende muy adecuada para la operativa que estaban buscando, en especial la de Amazon”. 

“Los nuevos centros logísticos ya posibilitan la implantación de los operadores de las nuevas tendencias en cuanto a innovación, robótica y digitalización, además de incorporar todas las características necesarias para la operativa logística en cuanto a eficiencia, distribución, espacio y sostenibilidad”, destacan desde Merlin.

El Head of Industrial & Logistics en Savills Aguirre Newman, Antonio Montero, considera que estos movimientos “confirman la doble tendencia de instalaciones Big Box en terceros anillos con la estrategia last mile para cubrir un adecuado abastecimiento en tiempo y forma a la población de las principales ciudades españolas”.

Por su parte, desde la patronal de logística UNO afirman que dentro del sector se han acelerado las inversiones en big data (en cuanto a logística predictiva), inteligencia artificial y machine learning. 

Robots que usa Amazon en su centro de Castellbisbal, en Barcelona.

A la par de los grandes centros logísticos que crecen en la periferia, las empresas también se abren a dos nuevos modelos: "el desarrollo de mini hubs en el centro de las ciudades o de las dark stores (puntos de venta que atienden exclusivamente las compras en línea)”, señala su presidente Francisco Aranda. Un ejemplo de ello es la reconversión de ocho tiendas de DIA para preparar pedidos ‘online’ tras el acuerdo alcanzado con Glovo.

El logístico, en auge sin burbuja

El auge del sector logístico en España ha despertado la atención de los grandes fondos internacionales. “Está muy de moda y los precios parece que van a subir”, explican a Invertia fuentes cercanas a estos inversores internacionales.

En el ámbito nacional, Merlin Properties explica que “este segmento ha ganado mucho peso durante el periodo de confinamiento, y esa penetración en el mercado está para quedarse lo que incitará a nuevas necesidades de espacio”.

Al igual que las otras fuentes consultadas por Invertia, Antonio Montero confirma que “los precios subieron ligeramente como consecuencia de la presión de la demanda tanto de operadores como de los developers e inversores y por las tendencias comentadas y en estos momentos podemos decir que se encuentran estabilizados”. “Y aún con el Covid-19 por el momento no existen evidencias plausibles de una corrección de precios a la vista”, ahonda.

Cuando en España un activo vinculado con la construcción sube de precio empieza a asomar por el horizonte la palabra burbuja. Merlin descarta su llegada. “Para nada, el mercado está creciendo de manera sostenible y los desarrollos existentes de suelo y naves están ajustando la promoción a ese crecimiento a una velocidad adecuada”, considera la socimi comandada por Ismael Clemente.  

En esa misma línea están en Savills Aguirre Newman. “No creo que estemos viviendo una burbuja; existen argumentos suficientes para pensar que el logístico tiene recorrido en España: rentas estables y en niveles razonables, amplio crecimiento del ecommerce a la vista y acelerándose, tasas de disponibilidad en niveles aceptables, rentabilidades atractivas en comparación con otros países Europeos, etcétera”, afirma Antonio Montero. 

Futuro del 'ecommerce' y la logística

Con o sin burbuja, lo que ocurra después del Covid-19 es incierto también en este sector. Si bien es cierto, la compras por Internet han madurado en España y seguirán creciendo. La encuesta de EAE Business School, realizada a un millar de personas en la segunda semana de mayo, da un indicador bastante revelador: el 53% asegura que aumentará las ventas online una vez acabe el confinamiento.

Desde UNO son conscientes de que el consumidor “irá a lo más fácil, es decir, el online” y que las tiendas -incluidas las de barrio- han apostado por estar en Internet y transformar sus modelos de negocio.

Cabe recordar que en algunos sectores el crecimiento ha sido increíble durante el confinamiento. Por ejemplo, en el del gran consumo se ha duplicado la cuota y ahora es superior al 3%, según datos de la consultora Kantar. Al principio del confinamiento, Mercadona cerró su ecommerce en zonas como Madrid. Semanas más tarde aceleró para estrenar su modelo de colmena en la comunidad. 

Y las compras de ropa por internet en el mes de marzo casi duplicaron las del año anterior, al pasar del 8,8% al 16% de las ventas totales del sector. Ya hemos visto cómo empresas como Inditex o Tendam (antiguo Cortefiel) se decantan por el comercio online. 

Con las tiendas volcadas en Internet, la cuestión está en saber hasta qué punto está preparada la logística. El desafío que tienen por delante supone “responder a la demanda rápidamente en poco tiempo, aunque no todas las empresas podrán hacer frente al reto”, señala el presidente de UNO. Eso quiere decir que muchas de ellas se quedarán en el camino en un futuro post-Covid donde el ecommerce y la logística formarán parte de la llamada 'nueva normalidad'.