Sabadell ha dado a conocer este jueves sus líneas estratégicas al mercado. Según las mismas, el banco aspira a obtener una rentabilidad sobre el capital tangible (ROTE) del 16% en 2027, cuando estima que su beneficio se situará en 1.600 millones de euros pese a no contar ya con su filial británica, TSB.
La meta de beneficio, que supone un 12% menos que en el ejercicio 2024 -en el que el banco se vio beneficiado por un contexto de tipos de interés favorable-, se logrará gracias a un incremento de la actividad en España "a un ritmo superior al del mercado en la mayoría de los segmentos de negocio" -estimado en un 4% anual-.
También a un aumento de la cartera de crédito de un 5% anual, a una mejora del perfil de riesgo, a mayores ingresos y a una gestión eficiente de costes.
En el mercado había mucha expectación sobre este plan estratégico, que los gestores del banco siempre han tenido intención de publicar lo más cerca posible en el tiempo al periodo de aceptación de la opa que BBVA lanzó sobre el banco catalán, que tendrá lugar en septiembre.
Este plan estratégico pretende ser un elemento más de decisión para los accionistas de Sabadell, que deben decidir entre el proyecto en solitario de Sabadell o vender sus títulos a BBVA para que este pueda crear un gigante bancario.
Dividendos y recompras de acciones
Esta hoja de ruta, denominada Plan estratégico 2025-2027, contempla, gracias a estos números, el reparto de 6.300 millones de euros a sus accionistas en tres años, cantidad en la que se incluye el dividendo extraordinario que se pagará con los ingresos de la venta de TSB, que asciende a 2.500 millones.
El total equivale al 40% del valor en bolsa de Sabadell y se traduce en un dividendo por acción repartido en 2025, 2026 y 2027 que será superior a los 0,02044 euros brutos por acción pagados en 2024.
Eso sí, estos 6.300 millones no se repartirán íntegramente en dividendos, sino que también se utilizarán para realizar recompras de acciones.
Según ha comunicado este jueves el banco, la cifra se obtiene de la distribución del 60% de los beneficios que obtendrá en los próximos tres años, el reparto de todo el capital que exceda del 13% y el dividendo extraordinario de 2.500 millones de euros por la venta de TSB, que debe aprobarse en junta de accionistas el próximo 6 de agosto.
En ese total también se incluyen los 1.300 millones de euros que se distribuirán con cargo al ejercicio actual mediante dividendos en efectivo y recompra de acciones.
El primer dividendo a cuenta se repartirá el próximo 29 de agosto -y finalmente no coincidirá con el periodo de aceptación de la opa, dado que BBVA lo abrirá en septiembre- y será de 0,07 euros brutos por acción.
Después, el banco remunerará a sus accionistas el 29 de diciembre y en la primavera de 2026 -este será el correspondiente a la venta de TSB-.
Sabadell se compromete a remunerar a sus accionistas con, al menos, 2.500 millones de euros en 2026 y 2027, al tiempo que destinará 1.002 millones de euros a programas de recompra de acciones, de los que ha ejecutado hasta el momento un 85%.
Más clientes y más crédito
La hoja de ruta de la entidad para su camino en solitario se basa en acelerar la captación de clientes a un ritmo del 15%, que será del 30% en el caso de clientes digitales.
Además, en el banco creen que podrán aumentar la cartera de hipotecas en torno al 4% anual, mientras que la financiación a empresas y pymes crecerá algo más. En crédito al consumo se prevé un crecimiento del 6% de media anual estos años.
Igualmente, prevé incrementos anuales medios de en torno al 5% en ahorro e inversión, con banca privada como elemento tractor; superior al 15% en seguros, gracias a la alianza con Zurich, y conseguir que el 25% de los negocios clientes tengan un TPV de Banco Sabadell en 2027, frente al 20% del cierre de 2024.
En total, prevé un crecimiento anual superior al 5% en el libro de crédito, ya sin TSB, una cartera sana y con una composición diversificada con un bajo perfil de riesgo. Este crecimiento le permitirá ganar entre 25 y 30 puntos básicos de cuota, desde el 8% actual, según sus estimaciones.
Con esa mayor actividad, Sabadell proyecta un margen de intereses de 3.900 millones de euros en el último año del plan estratégico y lograr una mejora anual media en los ingresos por comisiones en el entorno del 5%, gracias a mayores volúmenes en seguros, medios de pago y ahorro e inversión, mientras que el margen de clientes se estabilizará en torno al 3%.
Los gastos se estima que crecerán un 3% anual en el marco de una disciplina de contención de gastos.
El objetivo de Sabadell es que su coste de riesgo termine 2027 en alrededor de 40 puntos básicos, después de que la ratio de morosidad mejore por debajo del 2,5% y la ratio de cobertura se sitúe
por encima del 65%.
