La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha obligado a Sabadell a aclarar determinados aspectos técnicos relacionados con la venta de su filial británica, TSB, a Santander. El objetivo es que los inversores tengan una información adecuada, pero también que BBVA pueda elaborar lo más completamente posible el folleto de la opa que lanzó sobre el banco catalán hace más de un año.
Entre esos aspectos, Sabadell aclara que, pase lo que pase con la opa, la operación de TSB seguirá adelante si así lo aprueban sus accionistas en la junta convocada para el próximo 6 de agosto.
Sabadell indica en su comunicado que la CNMV "ha solicitado desarrollar ciertos aspectos adicionales sobre el contrato de compraventa de TSB suscrito por Banco Sabadell y Banco Santander".
Desde el propio banco señalan que estas aclaraciones se hacen "con el propósito de que la información sobre todas esas materias adicionales pueda, entre otros extremos, permitir a BBVA completar el folleto explicativo de la opa y adoptar en relación con esta las decisiones que en cada caso procedan, y a fin igualmente de mantener la simetría informativa con los accionistas y el mercado".
Entre otras, indica que "el contrato no se ve de ningún otro modo afectado negativamente por un cambio de control sobrevenido de Banco Sabadell". Es decir, que pase lo que pase con la opa, salga o no, la venta de TSB seguirá adelante. Eso, claro está, si la autorizan los accionistas de Sabadell en agosto.
El precio de la operación
Asimismo, los gestores de Sabadell aclaran que el precio inicial de venta de las acciones de TSB asciende a 2.650 millones de libras esterlinas (unos 3.100 millones de euros).
El mismo "se ajustará, al alza o a la baja" en función de la variación positiva o negativa del Valor Neto Contable Tangible de la entidad entre el 1 de abril de 2025 y la fecha de cierre de la operación, añaden en el documento remitido a la CNMV.
Cabe recordar que, en el momento del anuncio de la venta, Sabadell indicó que se había cerrado por "2.650 millones de libras (3.100 millones de euros), que se elevarán a 2.900 millones de libras (3.400 millones de euros) considerando los beneficios estimados de TSB hasta el cierre de la operación, previsto para el primer trimestre de 2026".
Santander, por su parte, comunicó que la operación se había realizado "a una valoración de 2.650 millones de libras (unos 3.100 millones de euros) en efectivo".
Además, el banco aclara que "para el reparto del dividendo extraordinario al que se refiere la segunda de las juntas generales convocadas no es necesaria ninguna autorización". Solamente la de los propios accionistas.
