El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, durante su intervención en el curso de la Apie en Santander.

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, durante su intervención en el curso de la Apie en Santander.

Banca

El BdE sobre los ERE: "Una banca no rentable acaba creando un problema de estabilidad y ya sabemos cómo acaba"

El gobernador advierte del "error" de dejarse "impresionar" por los buenos datos macroeconómicos que se están registrando.

25 junio, 2021 14:21

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Pablo Hernández de Cos, gobernador del Banco de España, ha insistido este viernes sobre que la banca española, como la europea, tiene una "sobrecapacidad" que necesita atajar y ha advertido de que es fundamental que el sector sea rentable para evitar problemas mayores.

"¿Por qué le parece al supervisor importante la rentabilidad? Porque es fundamental para la estabilidad financiera. El beneficio de la banca es la primera línea de defensa en una crisis. Un sector bancario no rentable acabará creando un problema de estabilidad financiera y ya sabemos cómo acaba", ha apuntado durante el XXXVIII seminario organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (Apie) y BBVA en Santander.

El gobernador se ha pronunciado en estos términos al ser preguntado sobre los fuertes Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) que están llevando a cabo algunos bancos y ha aprovechado para recordar que el sector tiene todavía una "sobrecapacidad".

No "dejarse impresionar" por los datos

Por otra parte, ha advertido de que "dejarse impresionar" por los buenos datos macroeconómicos que están registrando ya sería un "error" y es necesario seguir enfatizando las prioridades económicas de la pandemia.

"El objetivo de incrementar ese crecimiento potencial de la economía con reformas estructurales es ahora más importante (...) los buenos datos no pueden oscurecer la necesidad de ajustes estructurales", ha apuntado el gobernador.

Desde el Banco de España esperan un crecimiento "vigoroso" del Producto Interior Bruto (PIB) en el segundo trimestre. Según ha explicado Hernández de Cos, la previsión del Banco Central Europeo (BCE) es que este ejercicio el avance se sitúe por encima del 4% y que el crecimiento previo a la crisis se alcance en 2022.

El gobernador ha incidido en que las previsiones sobre la recuperación tanto del Banco de España como de otras instituciones están basadas en que la salida de la pandemia va a ser "muy favorable" y  ha explicado que de los fondos europeos depende más de un tercio (el 2%) del crecimiento del 5,8% previsto para el año que viene por el Banco de España. "No olvidemos que los fondos estructurales pueden ser utilizados también para financiar reformas estructurales", ha advertido.

Por otra parte, el gobernador ha destacado que el vigor de la recuperación dependerá también de adónde se destine el ahorro forzoso registrado en 2020, que alcanzó el 4,4% del PIB español, debido a que muchas familias no pudieron realizar el consumo que tenían previsto a causa de las restricciones sanitarias.

Con todo, desde el Banco de España no prevén que todo el ahorro se vaya a liberar por completo en forma de consumo, principalmente porque está concentrado en rentas altas, cuya propensión marginal al consumo es menor, y porque el aumento del déficit generará temor a impuestos entre las familias, por lo que tenderán a no gastarlo. Hernández de Cos ha insistido en que la incertidumbre sobre esta cuestión es "elevada".

El SMI

En otro orden de cosas, ha defendido el polémico documento de trabajo del Banco de España sobre el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que concluía que se habían dejado de crear hasta 184.000 empleos tras la subida.

En su opinión, es necesaria una mayor investigación económica para que las autoridades económicas y políticas puedan tomar decisiones. El documento, según ha dicho, no tenía "ningún tipo de connotación política" y sí "análisis rigurosos", aunque era "necesariamente incompleto". "Nadie pretende resolver una cuestión tan difícil en un solo documento", ha añadido.

Hernández de Cos ha explicado que al tomar una medida de política económica se generan algunos beneficios para algunos agentes y otros perjuicios para otros, pero compete al ámbito político valorar si merece la pena implantarla.

"Estamos todavía en una situación de crisis económica y algunos de los colectivos potencialmente más afectados por esta medida han sido los más afectados por la crisis, los jóvenes. Esto incorpora un elemento de prudencia adicional", ha apuntado.