Nuevo paso adelante de la banca española para liderar el uso del dinero digital en Europa y, así, estar preparados para la posible llegada del euro digital en un futuro. Banco Sabadell, Banco Santander, Bankia, BBVA y CaixaBank inician una nueva prueba de concepto sectorial de distribución de dinero digital dentro de la iniciativa Smart Money impulsada por Iberpay, la empresa española especializada en servicios de pago que lidera el proyecto y que ya ha puesto en marcha otros de éxito incuestionable como Bizum.

El objetivo de la nueva experiencia será testear la emisión, distribución, intercambio y redención de dinero digital tokenizado en el entorno de pruebas controlado (y ya disponible) de la Red-i (red blockchain interbancaria), gestionada por Iberpay.

Esta prueba de concepto, que podrá contar con la participación adicional de otros bancos españoles, se prolongará hasta el segundo trimestre de 2021.

La iniciativa Smart Money es una continuación y la evolución de la iniciativa sectorial de pagos programables Smart Payments, cuya prueba de concepto se completó con éxito en julio de 2020 con la participación de estos mismos cinco bancos, y que permitió validar la viabilidad de iniciar transferencias inmediatas programadas en contratos inteligentes (smart contracts) desde redes blockchain, como la Red-i, mediante su conexión con el sistema nacional de pagos (SNCE), completándose más de 20.000 transferencias inmediatas en esta prueba de concepto.

La idea es testear sectorialmente distintas opciones de diseño de la representación digital del dinero, de cara a su eventual aplicación futura en soluciones digitales tokenizadas, con respaldo de fondos en dinero y cuentas de banco central.

Asimismo, se probarán diferentes opciones de distribución del dinero digital por parte de los bancos a sus clientes, así como distintas formas de intercambiar dinero digital entre clientes finales.

El avance se produce, además, en un momento en el que el Banco Central Europeo (BCE) ha vuelto a reactivar su proyecto de euro digital, ante la evidencia de que el cambio en los hábitos de pago que se ha producido durante la pandemia ha llegado para quedarse.

Con estas pruebas, la banca española podría adelantar a sus pares europeos en cuanto a este salto que tanto para el sector, como para empresas y particulares, supondrá la irrupción del dinero digital, sea o no finalmente emitido por el BCE.