El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante la visita a la planta geotérmica de Cardial Recursos Alternativos, en Almería.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante la visita a la planta geotérmica de Cardial Recursos Alternativos, en Almería. Rafael González / Europa Press.

Empresas

Las ventas de las grandes empresas se ralentizan en 2022 por la caída del consumo y el sector 'agro' agoniza

La industria agroalimentaria registra caídas interanuales todos los meses desde cuarto trimestre de 2020. 

10 febrero, 2023 03:13

En cómputo anual, 2022 fue un año positivo para la economía española, que creció por encima del 5%, más que lo esperado. Sin embargo, un análisis mensual muestra cómo el PIB se fue ralentizando con el avance de los meses hasta prácticamente estancarse en los últimos compases del año. 

Esto se ha dejado notar en el mercado laboral, como ya ha dado cuenta la última edición de la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística (INE), y en las cifras de facturación del sector privado. Las ventas de las grandes empresas y de las pymes societarias del tercer y el cuarto trimestre del año reflejan una importante desaceleración, según los datos de la Agencia Tributaria.

Si bien es cierto que la facturación de este tipo de compañías ha crecido todo el año, en la segunda mitad de 2022 ha pegado un importante frenazo. En el primer y en el segundo trimestre, el crecimiento interanual fue del 9,9% y del 10,4% respectivamente. Pero en el tercer y en el cuarto trimestre, esta evolución se ralentizó al 7,3% y a 3%. 

Se trata de un fenómeno que se contempla especialmente en la industria. Las ventas de estas empresas perdieron ventas en la segunda mitad del año, pasando de crecimientos del 3% y del 7,6% a evoluciones del 2,8% y del 0,5%. 

Más dramático es lo ocurrido en los ámbitos de la construcción o actividades inmobiliarias. En el cuarto trimestre las ventas de estos sectores cayeron en 2022 respecto al mismo periodo de 2021 (un -2,8% y un -6,6%, respectivamente). 

Se trata de un fenómeno que se deja notar en todos los sectores, sin excepción. Con todo, la situación más dramática se ha instalado en las empresas del ámbito de la agricultura, ganadería, silvicultura y pesca. ¿Por qué? La caída de ventas es constante desde 2020

Los datos de la Agencia Tributaria reflejan caídas de ventas todos los trimestres desde finales de 2020. Un desplome (concretamente, 27 meses consecutivos de desplome) que en la segunda mitad de 2022 se aceleró, con una reducción de la facturación del 16,2% en el tercer trimestre y del 6,8% en el cuarto. 

Empleo

El empleo en grandes empresas y pymes societarias también muestra una evolución similar. Si bien la cifra anual es positiva (los cantidad de trabajadores crece un 5,2%, por encima del 3,9% de 2021), el análisis de la marcha del año muestra que el incremento de las plantillas ha ido de más a menos

De los incrementos del empleo del 6,6% de los primeros meses de 2022 se pasó a un diciembre en el que solo hubo un 2,8% más de trabajadores que en el mismo mes de 2021. 

De nuevo el sector 'agro' es el que tiene una marcha más preocupante. De los 12 meses que tiene 2022, la cifra de trabajadores solo mejoró en cuatro de ellos

Respecto a salarios, las grandes empresas españolas mostraron el año pasado una mayor generosidad en las subidas que el sector privado en general. Si las subidas por convenio se quedaron en cerca del 3% el año pasado, los incrementos en estas compañías fueron de media del 3,3%. 

Los vaticinios no son positivos en el caso del empleo. Así lo prevé Adecco. Pese a que el número de ocupados volverá a los 20,4 millones en el segundo trimestre del año, la tasa de paro se elevará al 13% para mitad de 2023