Finalmente, Virginia Guinda, vicepresidenta de Foment del Treball, ha confirmado su candidatura a presidir la CEOE y a enfrentarse a Antonio Garamendi en las futuras elecciones. Como parte de su programa, ha afirmado que "los salarios tienen que subir" y ha apostado por un pacto de rentas y por hacer una "nueva reforma laboral". 

Guinda, también CEO de Iberboard, ha presentado este viernes ante los medios de comunicación su candidatura a presidir la patronal. No ha revelado los avales con los que cuenta para ello, y no lo hará hasta que tenga que presentarlos, el próximo 8 de noviembre. 

En su intervención, ha indicado que su objetivo es generar una CEOE "más participativa y colegiada", en la que las asociaciones y órganos que la integran tengan mayor capacidad de influencia y decisión.

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En este sentido, ha aclarado que "la CEOE tendría que ser complaciente con sus socios", y no con el Ejecutivo. "Tenemos que estar preocupados por que sus socios estén representados. Con el Gobierno y los partidos políticos con representación en el Congreso, la relación debe ser de máxima independencia, siendo capaces de influir en ellos y que dentro de sus agendas políticas incluyan nuestras propuestas". 

A consultas de los periodistas, se ha mostrado de acuerdo con que hay que subir salarios. Sin embargo, ha descartado dar una horquilla al respecto. "La capacidad que tengamos depende también de cómo evolucionan las cotizaciones y qué conceptos vamos a tener que tributar".

En este sentido, no ha cerrado la puerta las cláusulas de revisión salarial que exigen los sindicatos y que rechaza el actual equipo negociador de la CEOE en el AENC. 

Ha apostado por que todas estas cuestiones "se traten de forma más holística" y se ha postulado a favor de un "gran pacto de rentas que se tiene que hacer" y en el que tienen que estar vinculados funcionarios, pensionistas, trabajadores y empresarios. Es ética y moralmente acertado y nos lleva a un objetivo común". 

SMI

Por otro lado, y respecto al salario mínimo profesional y sus subidas (SMI), ha considerado que "es un concepto excesivamente simplificado. No es lo mismo en un sector industrial u otro más agrario, o para un joven que se está incorporando al mercado laboral. No debería darnos miedo la complejidad".

Consultada sobre si plantearía cambios respecto a la reforma laboral, ha opinado que habría que "hacer una nueva reforma laboral para actualizarla". Cabe recordar que Foment del Treball se manifestó en su momento en contra del cambio legislativo. 

Por otro lado, se ha mostrado en contra de las nuevas figuras fiscales propuestas por el Ejecutivo, tales como los impuestos a la banca o a las energéticas. "La situación actual no se debe abordar con soluciones parciales o particulares", ha indicado. Considera que el futuro debe pasar por "una revisión a fondo del sistema fiscal".