En un reciente informe publicado este martes, el equipo de análisis de la firma francesa cree que ¿los mercados financieros están infravalorando el problema de las cláusulas suelo (en torno a 4.500 millones de euros) y, muy particularmente, las litigaciones por los gastos de las hipotecas (en torno a 34.000 millones de euros)¿.

El Tribunal Supremo español calificó de abusiva una cláusula que obligaba al cliente a asumir la totalidad de los gastos hipotecarios. Según recuerda Kepler Cheuvreux, ¿la práctica general del mercado ha sido que los clientes pagaban todos los costes: notario, registro, tasación y costes administrativos¿. Una actuación que ¿ahora el Tribunal Supremo ha declarado que la imposición de costes al cliente es nula y sin efecto¿.

¿El riesgo relacionado con los costes hipotecarios ha sido subestimado por el mercado y infravalorado por el sector bancario, nosotros sí lo vemos como un riesgo serio¿, apuntan en su informe. Según sus cálculos, el riesgo de los gastos hipotecarios desde 2000 es de 34.000 millones de euros. Para poner en contexto esta cifra, los bancos del Ibex 35 ganaron 9.245 millones de euros en 2016.

Según las estimaciones de Kepler Cheuvreux, en el peor de los escenarios el coste para las siete entidades del Ibex 35 (CaixaBank, BBVA, Sabadell, Bankia, Santander, Popular y Bankinter) alcanzaría los 25.300 millones de euros. Mientras que en el mejor supondría 14.600 millones.

CaixaBank sería el más perjudicado con una factura que oscilaría entre los 6.400 millones de euros y los 3.700 millones de euros, mientras que Bankinter sería el menos dañado con una horquilla de 1.000-600 millones según el escenario. Eso si se toman los valores absolutos, si se atiende al tamaño de la entidad Banco Sabadell tendría el mayor porcentaje y Santander el menor.

Pese a esta alerta, Kepler Cheuvreux cree que este riesgo podría ser manejable para el sector. Según su visión, ¿el sistema bancario español es lo suficientemente sano para digerirlo¿. Además, alerta de que ¿los costes judiciales podrían compensarse con un aumento de los tipos de interés¿.