La vicepresidenta primera, Nadia Calviño, conversa con el ministro de Finanzas alemán, Christian Lindner, durante una reunión del Eurogrupo

La vicepresidenta primera, Nadia Calviño, conversa con el ministro de Finanzas alemán, Christian Lindner, durante una reunión del Eurogrupo Unión Europea

Macroeconomía

Alemania pide que las nuevas reglas fiscales de la UE impongan ajustes más duros a países como España

Berlín quiere limitar el margen de maniobra de la Comisión a la hora de negociar planes de ajuste multianuales con cada Gobierno. 

7 abril, 2023 02:30
Bruselas

Alemania pide que las nuevas reglas presupuestarias de la Unión Europea impongan ajustes más duros a los países altamente endeudados como España. Pese al acuerdo alcanzado en marzo en el Ecofin para relajar el Pacto de Estabilidad, el Gobierno de Berlín contraataca ahora reclamando establecer objetivos numéricos comunes con el fin de garantizar "una reducción progresiva, realista, en plazo y suficiente de las ratios de deuda y déficit".

Con esta iniciativa, el ministro de Finanzas alemán, Christian Lindner, quiere reducir el margen de maniobra de la Comisión de Ursula von der Leyen a la hora de negociar planes de ajuste plurianuales de forma bilateral con cada Estado miembro. Berlín teme que el Ejecutivo comunitario no sea suficientemente estricto con los Gobiernos y permita que la deuda pública siga descontrolada.

En concreto, Alemania exige que los países en situación de "alto riesgo" por su endeudamiento, como España, recorten su ratio de deuda al menos 1 punto porcentual al año. A los Estados miembros con menor carga de deuda se les exigiría un esfuerzo menor de 0,5 puntos de recorte. Para los países por debajo del umbral del 60% de deuda no se prevé ningún objetivo concreto, según un documento de trabajo al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL-Invertia.

[La deuda pública cierra 2022 con 1,502 billones y modera su peso sobre el PIB al 113,2%]

España es el cuarto país de la UE con una ratio de deuda pública más elevada, sólo superada por Grecia, Italia y Portugal. La deuda del conjunto de las administraciones públicas cerró el ejercicio 2022 en 1,502 billones de euros. Esta cifra supone un incremento de 75.305 millones respecto al año anterior, aunque redujo su peso sobre el PIB hasta el 113,2%, situándose por debajo del objetivo del Gobierno (115,2%).

En su documento, Berlín reclama además imponer a los Estados miembros altamente endeudados límites más estrictos al techo de gasto, que será el indicador de referencia de las nuevas reglas fiscales. "Para reducir los déficits, el requisito básico es que el gasto tiene que aumentar más lentamente que el crecimiento potencial", señala el documento alemán.

En el caso de España, el aumento del gasto público tendría que ser al menos un punto porcentual inferior al crecimiento potencial. Es decir, si Bruselas prevé para la economía española un avance del 2% en 2024 (primer año en que en teoría se aplicarán las nuevas reglas), el gasto sólo podrá aumentar como máximo un 1%. 

Alemania está dispuesta a aceptar una excepción a esta regla de gasto para el uso de fondos europeos, como los Next Generation. Eso sí, siempre que se respete el objetivo mínimo de reducción de la deuda pública. 

El comisario de Asuntos Económicos, Paolo Gentiloni, tiene previsto presentar sus propuestas durante el mes de abril

El comisario de Asuntos Económicos, Paolo Gentiloni, tiene previsto presentar sus propuestas durante el mes de abril Unión Europea

La duración de los planes de ajuste plurianuales "debe limitarse a los ciclos electorales regulares para permitir que el proceso democrático en los Estados miembros configure sus políticas económicas", señala el documento.

El Gobierno de Berlín considera estas salvaguardas "esenciales" para que las nuevas reglas fiscales garanticen un "enfoque multilateral y la igualdad de trato de los Estados miembros", así como para garantizar que se cumpla el objetivo de "una reducción progresiva, realista, en plazo y suficiente de las ratios de deuda y déficit".

[El Ecofin respalda relajar las reglas de disciplina fiscal de la UE pese a los bandazos de Alemania]

Las nuevas exigencias de Alemania constituyen un intento de última hora de presionar a la Comisión Europea para que endurezca sus propuestas legislativas sobre la reforma del Pacto de Estabilidad, que el comisario de Asuntos Económicos, Paolo Gentiloni, ha anunciado para este mes de abril. Las reglas fiscales están suspendidas desde el estallido de la pandemia en 2020, pero volverán a aplicarse en 2024.

Lindner se ha resistido desde el principio a los planes de Von der Leyen, que consisten en dar más flexibilidad y más tiempo a los Gobiernos para poner sus cuentas en orden tras el tsumani de la pandemia y la guerra de Ucrania.

Para ello, Bruselas plantea sustituir los objetivos de reducción de déficit y deuda iguales para todos por planes de ajuste plurianuales (en principio de cuatro años) a medida de cada Estado miembro negociados de forma bilateral entre Bruselas y las capitales, siguiendo el modelo de los fondos Next Generation

Los plazos para poner las cuentas en orden podrán ampliarse hasta siete años si el Gobierno en cuestión ejecuta reformas o inversiones de interés europeo, por ejemplo en defensa o en la doble transición digital y verde.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su rueda de prensa en Roma

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su rueda de prensa en Roma Moncloa

Alemania siempre se ha opuesto a esta reforma a la carta con el argumento de que pone en riesgo la igualdad de trato entre los Estados miembros y no garantiza una reducción suficiente de la deuda.

Pero tras comprobar que no tiene suficientes apoyos para bloquearla (su principal aliado, Países Bajos, ha pactado con España), Lindner pretende ahora endurecerla introduciendo objetivos numéricos comunes, que no estaban en la propuesta original de Bruselas y que no gustan en Madrid, Roma o París.

[La reforma del Pacto de Estabilidad de Von der Leyen contenta a España y Francia pero enerva a Alemania]

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha marcado como uno de los objetivos prioritarios de la presidencia española de la UE aprobar la reforma del Pacto de Estabilidad. 

"Tenemos que redefinir, revisar, las reglas fiscales, la gobernanza económica en Europa. Y todo se tiene que hacer este año, no podemos esperar al año 2024 o al año 2025. Tenemos que hacerlo en el año 2023", dijo este miércoles durante su rueda de prensa conjunta en Roma con Giorgia Meloni. Las nuevas exigencias de Berlín complican enormemente el calendario de Sánchez.