La España rural pierde servicios. Según datos del informe 'El acceso a servicios en la España rural', elaborado por el Banco de España, los habitantes de las zonas rurales de nuestro país tienen que recorrer una media de 23 kilómetros para ir a un centro de salud, un supermercado o una escuela, un 20% más que en las ciudades, donde la distancia habitual hasta los servicios básicos es de apenas dos kilómetros.

Las localidades rurales, que suponen el 82% de los municipios españoles (aunque solo albergan al 16% de la población), tienen que convivir con la ausencia de centros educativos, de salud, comercios, bibliotecas o sucursales bancarias. Atender las necesidades de las poblaciones rurales se ha convertido en una de las prioridades del sector bancario en los últimos años, para asegurar la inclusión de los ciudadanos y garantizar su acceso al sistema financiero.

Las propias entidades, conscientes de la precaria situación de muchas localidades rurales, han puesto en marcha iniciativas para acercar sus servicios a las poblaciones más alejadas. Es el caso de CaixaBank, que dispone de la red de oficinas y cajeros automáticos más amplia de toda España, con unas 4.000 oficinas repartidas por todo el territorio nacional. Esto le permite estar presente en más de 2.230 municipios, lo que supone que en casi tres de cada diez pueblos de España existe una oficina.

En algunas localidades, 483 concretamente, CaixaBank es la única entidad financiera, de manera que ha adquirido el compromiso de no abandonar estos servicios, asegurándose de llegar a prácticamente todos los rincones del país.

La capilaridad de la red de oficinas físicas de la entidad queda completada con otro de los servicios diferenciales de CaixaBank, los ofimóviles u oficinas con ruedas. Estas oficinas, ubicadas en autobuses o grandes furgonetas que visitan las pequeñas localidades rurales, permiten a cualquier usuario, sea o no cliente de la entidad, realizar operaciones bancarias habituales como retirar efectivo, hacer ingresos y pagar recibos.

Los 21 vehículos con los que cuenta la entidad recorren cada mes más de 52.000 kilómetros para llegar a aquellas localidades que no disponen de oficina bancaria. Cada oficina móvil cuenta con diferentes rutas y, en función de la demanda, visita cada localidad entre una y cuatro veces al mes.

Así, las oficinas móviles de CaixaBank evitan la exclusión financiera de más de 335.000 ciudadanos de 783 pequeñas localidades, principalmente de personas mayores de 70 que, por lo general, pueden tener más limitaciones para acceder de otra manera a los servicios financieros.

Actualmente, las oficinas móviles de la entidad prestan servicio en trece provincias de seis comunidades autónomas: Ávila, Burgos, León, Palencia y Segovia, en Castilla y León; Ciudad Real, Guadalajara y Toledo, en Castilla-La Mancha; Castellón y Valencia, en la Comunidad Valenciana; Granada, en Andalucía, la Comunidad de Madrid y La Rioja.

En 2024 el servicio que CaixaBank presta mediante estas oficinas móviles se ha incrementado un 23%, lo que supone el aumento del 82% desde 2021, ya que entonces llegaba a 430 poblaciones.

Castilla y León, la comunidad que registra la mayor pérdida de habitantes en términos absolutos de toda España, es precisamente en la que mayor presencia tiene el servicio ofimóvil de CaixaBank, que llega a 492 poblaciones castellanoleonesas. Por su parte, las oficinas móviles en La Rioja aseguran la inclusión financiera en 78 localidades; en Castilla-La Mancha ofrecen servicio en 63 poblaciones; en la Comunidad Valenciana llegan a 70 localidades; en la Comunidad de Madrid a 44 poblaciones; y a 36 localidades de Granada.