Economía

Los sindicatos de Nissan en España hacen un frente común para evitar cierres

30 enero, 2020 14:40

Los sindicatos de las fábricas de Nissan en España han anunciado este jueves que se movilizarán en un "frente común" para impedir el cierre de sus centros, de los que dependen 25.000 familias, y han reclamado la ayuda de las administraciones para buscar una alternativa industrial.

Representantes de CCOO, UGT, CGT y Sigen-USOC en las plantas de Nissan en Barcelona (Zona Franca, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca) se han reunido en la sede de UGT en la capital catalana para trazar un plan conjunto de actuación, coordinados con los sindicatos de las fábricas de Ávila y Cantabria.

"Estamos dispuestos a hacer lo que sea necesario. Iremos donde tengamos que ir. No vamos a parar hasta que tengamos una solución positiva para todos los centros", ha afirmado en una rueda de prensa posterior al encuentro el representante de Sigen-Usoc, Miguel Ruiz.

Los sindicatos han lanzado un último SOS después de que Nissan haya decidido dejar de fabricar en la Zona Franca a partir de mayo la pick-up X-Class de Mercedes, abocando a la principal factoría de la marca nipona en España a trabajar a un 20 % de su capacidad productiva, lo que cuestiona la viabilidad de la planta.

Los representantes de los trabajadores desconfían cada vez más de las promesas de la multinacional sobre planes de negocio que, han asegurado, nunca se acaban confeccionando ni aplicando, y han expresado su temor a que se esté dejando sin producción las fábricas españolas para hacer inevitable su cierre.

El portavoz de CCOO en Nissan, Miguel Angel Boiza, ha afirmado que "nos da miedo que las decisiones que se están tomando sean para dejar morir de manera lenta las plantas de producción en España", de las que dependen, han dicho, unas 25.000 familias, de trabajadores directos e indirectos (proveedores y subcontratas).

De momento, los sindicatos han anunciado una concentración el próximo martes ante el consulado de Japón en Barcelona, y otras protestas en Cantabria y Ávila, en el marco de un calendario de movilizaciones que se irá concretando sobre la marcha.

En el caso de las plantas de Barcelona, en las que trabajan unas 3.000 personas, Ruiz ha insistido en que la dirección europea de Nissan dejó claro "de manera clara y contundente" en su reunión con los sindicatos del pasado martes que "no teníamos garantías de futuro ahora mismo y que necesitamos un plan".

"Sin alternativa no tendremos futuro. O nos dan un coche o cierran, está claro", ha advertido Boiza.

Los sindicatos han asegurado que Renault, el socio fuerte de la alianza Nissan-Renault, está atrayendo producción de centros de Nissan en Europa hacia plantas de la marca francesa, como ocurrió con el modelo de combustión NV200.

Entre los próximos movimientos que se pueden dar en el tablero de esta alianza, los representantes de los trabajadores temen que se decida trasladar a una planta francesa la producción del modelo eléctrico de la NV200, que se ensambla en Zona Franca.

Además, advierten de que la producción de la pick up Navara y la pick up Renault Alaskan son insuficientes para garantizar la viabilidad de la planta hasta 2023, fecha en la que se supone que podría arrancar la producción de un nuevo modelo, en el caso de que se anuncie.

Ante esta situación, los sindicatos han vuelto a hacer un llamamiento a las administraciones públicas y, en concreto, al Gobierno, para arrancar a Nissan un plan de viabilidad para sus plantas españolas, sobre todo después de que el presidente Pedro Sánchez se interesara por ellos en Davos durante un encuentro con ejecutivos de la marca nipona.

La fábrica de la Zona Franca, la más importante de Nissan en España, ha ido perdiendo carga de trabajo de manera paulatina en el último año, lo que acabó en junio de 2019 con la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectó a 600 personas, con prejubilaciones y bajas incentivadas.

El goteo de bajas y de caída de producción ha sido también una constante en los últimos años en Ávila, que ha dejado de fabricar camiones después de 60 años y se ha reconvertido en centro de recambios de piezas; y en Cantabria, donde produce también componentes.