Madrid, 27 nov (EFECOM).- Endesa ya no destinará el 100 % de su beneficio a dividendos a partir de 2021, cuando sólo distribuirá el 80 %, y en 2022 sólo repartirá el 70 %, a fin de contar con más recursos para invertir en renovables, a las que se destinará casi la mitad de los 7.700 millones de inversión para el periodo 2019-2022.

La compañía eléctrica y gasística, participada en un 70 % por la italiana Enel, ha dado a conocer este miércoles la actualización de su plan estratégico, en el que al recorte del 'pay out' (porcentaje del beneficio destinado a dividendo) para 2021 anunciado el año pasado, se suma ahora uno nuevo del 70 % para 2022.

Una política con la que Endesa persigue dedicar más fondos del beneficio que obtiene a inversiones y para el cuatrienio 2019-2022 su inversión neta acumulada crece un 20,3 %, hasta alcanzar los 7.700 millones de euros en el periodo.

Las renovables serán las grandes protagonistas de estas inversiones, al alcanzar los 3.800 millones (un 90 % más que lo previsto para el periodo 2018-2021), con lo que acaparan casi la mitad de toda la inversión prevista en el periodo.

La eléctrica contaba con una cartera total de proyectos renovables de 16,1 gigavatios (GW) a octubre de 2019, de los que 12 GW están en una fase temprana.

Además, en el periodo 2020-2022, Endesa pondrán en marcha 2,9 GW de renovables y 1,2 GW a partir de 2022, en total 4,1 GW, de los que el 88 % serán solares y el resto, el 12 %, eólicos.

Las inversiones en renovables permitirán a Endesa aumentar su capacidad instalada de renovables un 38 %, hasta los 10,2 GW, y que su producción renovable se multiplique por dos, hasta los 17,8 teravatios hora (TWh).

Las redes son las otras grandes protagonistas de las inversiones de Endesa para el periodo, con más de una cuarta parte -2.000 millones de euros- de la inversión total prevista.

En este caso, las inversiones crecen un 11 % respecto a la revisión 2018-2021 del plan y el 50 % de toda la inversión en redes, alrededor de 1.100 millones, será para digitalización.

La inversión en Endesa X -la marca que concentra loa negocios de movilidad eléctrica y nuevos servicios a consumidores- será de 200 millones.

En este ámbito, la compañía tiene previsto multiplicar por siete el número de puntos de recarga de vehículos para pasar de los 5.000 que habrá cuando acabe 2019 a 36.000 en 2022.

Las inversiones netas destinadas a la digitalización que, según Endesa contribuirán con un 25 % al crecimiento del resultado bruto operativo (ebitda) en el periodo, ascienden a 1.300 millones de euros, de las que 1.100 millones -el 81 %- serán para redes; mientras que a Endesa X se destina un 5 %.

La gasística espera obtener un beneficio neto ordinario acumulado en el periodo 2019-2022 de 6.900 millones de euros, con un crecimiento acumulado del 27 % y de un promedio anual del 8 %.

Asimismo, prevé que el ebitda pase de 3.700 millones en 2019 a 4.300 millones en 2022, con un crecimiento acumulado del 16 % en ese tiempo (600 millones) y un incremento del 5 % de promedio anual.

Pero en 2021 y 2022, la totalidad del beneficio neto de Endesa ya no irá a pagar dividendos, práctica que la compañía inició en 2015.

A pesar de esas reducciones, la cantidad que la compañía destinará a retribuir a sus accionistas con dividendos en el periodo 2019-2022 se prevé que ascienda en total a 5.970 millones de euros, frente a los 5.940 millones para el 2018-2021.

El consejero delegado de Endesa, José Bogas, ha dicho, en una conferencia con analistas, que esta política de dividendos se extenderá en el tiempo y que la intención de la compañía es dejar el "pay out" en el 70 % a medio y largo plazo, mientras que el director financiero, Luca Passa, ha señalado que con el cambio se persigue lograr un equilibrio entre la inversión y el crecimiento, por un lado, y la retribución a los accionistas, por el otro.

Los títulos de Endesa han subido hoy en bolsa y poco antes del cierre del mercado se revalorizaban un 1,19 %, hasta los 24,66 euros la acción de la eléctrica, que en el año se ha revalorizado un 26,34 %.

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