Madrid, 31 oct (EFECOM).- El BBVA redujo un 2,5 % el beneficio atribuido obtenido por su filial española en los nueve primeros meses de este ejercicio, hasta los 1.064 millones de euros, debido, entre otras cosas, al impacto de la estacionalidad y de la nueva normativa contable NIIF 16.

El beneficio obtenido en España representa menos de un tercio de los 3.667 millones de euros que ganó el Grupo BBVA en todo el mundo hasta septiembre, y es inferior a los casi 2.000 millones logrados por la filial mexicana, la que más aportó a las cuentas trimestrales.

En una nota remitida a la CNMV, la entidad explica que los préstamos y anticipos a la clientela cayeron un 2,5 % y quedaron en 166.217 millones de euros, al tiempo que los depósitos de los clientes sumaron 180.653 millones tras bajar un 1,5 %.

El ratio de morosidad mejoró en septiembre hasta el 4,6 %, frente al 5 % del mismo periodo de 2018, en parte gracias al impacto de la venta de algunas carteras "dudosas y fallidas", que también afectó a los saneamientos, explica la entidad.

La cobertura de esta cartera impagada se situó en el 59 %, por encima del 57 % correspondiente al cierre del pasad ejercicio.

En cuanto a los principales márgenes de la cuenta, el de intereses -que recoge casi todos los ingresos- bajó un 1,9 % interanual y quedó en 2.721 millones de euros.

Las comisiones netas aumentaron un 1,3 % interanual, gracias al incremento de las cobradas por el uso de tarjetas, por venta de seguros y las cobradas a clientes mayoristas, lo que desembocó en un margen bruto de 4.307 millones, un 4,2 % inferior al del año anterior.

Tras restar a esta cantidad los 2.441 millones que se destinaron a cubrir los gastos de explotación, que se redujeron un 3 %, el margen neto retrocedió un 5,6 % y quedó en 1.866 millones, al tiempo que el ratio de eficiencia empeoró ligeramente hasta el 56,7 % desde el 55,9 % anterior.

La entidad destinó 106 millones a cubrir el deterioro de activos financieros frente a los 287 millones de septiembre de 2018, gracias al efecto positivo de la venta de carteras de créditos hipotecarios dudosos y fallidos realizadas en el segundo trimestre del año.