Economía

Consorcio chino hará línea de Metro de Bogotá a la que aspiraba española FCC

17 octubre, 2019 22:24

Bogotá, 17 oct (EFECOM).- El consorcio APCA Transmimetro, formado por dos empresas chinas, ganó la licitación para construir y operar por 20 años la primera línea del metro de Bogotá, obra que requerirá una inversión de más de 12 billones de pesos (3.477 millones de dólares) a la que aspiraba la española FCC, confirmó hoy la Alcaldía.

El consorcio está formado por China Harbour Engineering Company Limited y Xi'An Metro Company Limited, que superaron la propuesta del grupo hispano-mexicano Metro de Bogotá, conformado por FCC Concesiones de Infraestructura de España y las mexicanas Carso y Promotora del Desarrollo de América Latina.

Los asiáticos fueron seleccionados al presentar la propuesta económica más baja de las dos que llegaron a la fase final de este proyecto que la capital colombiana discutía desde hace más de 60 años.

El anuncio lo hizo el gerente de la Empresa Metro Bogotá, Andrés Escobar, en un acto realizado en el centro de la ciudad, donde estará una de las futuras estaciones, que contó con la asistencia del presidente colombiano, Iván Duque; la vicepresidenta, Marta Lucía Ramírez, y el alcalde de la capital, Enrique Peñalosa.

"Procedimos a adjudicar el contrato de concesión para construir y operar el metro de Bogotá, por los siguientes 20 años, al grupo conformado por APCA Transmimetro", dijo Escobar.

El consorcio chino firmará en los próximos 45 días un contrato con las autoridades bogotanas por un valor de 12 billones de pesos para la ejecución del proyecto, que comprende una línea de superficie de 23,9 kilómetros entre la localidad de Bosa, en el sur, y la calle 72, donde está el centro financiero.

Escobar explicó que la licitación, prevista para el 21 de octubre, fue adjudicada con anticipación porque recibieron por adelantado el informe de la banca internacional sobre la viabilidad financiera de la obra.

El proyecto tiene el apoyo financiero del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco Mundial (BM) y el Banco Europeo de Inversiones.

"Después de que recibimos la no objeción de los bancos, pudimos dar paso al momento más esperado que representa el final del proceso: realizar la adjudicación", dijo.

Al referirse a la obra, que permitirá aliviar el caótico tráfico de Bogotá, una urbe con más de ocho millones de habitantes, el presidente Duque destacó la transparencia en la adjudicación del contrato.

"El proceso que se ha llevado a cabo para esta adjudicación, con el acompañamiento de tres organismos internacionales y organismos de control, es prenda de garantía para Bogotá. Esta iniciativa se adjudica y queremos es que se haga realidad", afirmó el mandatario.

Sin embargo, expertos cuestionaron al ganador, ya que la empresa matriz de China Harbour Engineering Company fue sancionada en 2011 por el Banco Mundial por corrupción en Filipinas, castigo que se le levantó hace dos años.

"Lo más conveniente, en mi opinión, es que la Alcaldía de Bogotá no adjudicara a este consorcio, amparado en las normas de transparencia del Banco Mundial", manifestó en su cuenta de Twitter el economista Jorge Restrepo, director del Centro de recursos para el Análisis de Conflictos (Cerac).

Duque añadió que la construcción del Metro de Bogotá generará "desarrollo, empleo, oportunidades y competitividad".

Hasta ahora el único Metro existente en Colombia es el de Medellín, la segunda ciudad del país, que comenzó sus operaciones el 30 de noviembre de 1995 y cuenta con dos líneas.

El alcalde de Bogotá aseguró, refiriéndose a sus opositores de izquierdas, que "hay enemigos que hasta el día de hoy quieren dejar a Bogotá sin Metro" pero que "la realidad es que ya está adjudicada la licitación de este proyecto".

Igualmente dijo que el proyecto es una expresión de "confianza en Colombia impresionante" y recordó que el concesionario no solo debe construir el metro, sino operarlo durante 20 años.

Por su parte, el exministro de Hacienda Mauricio Cárdenas destacó que con la adjudicación del metro "las relaciones entre Colombia y China se elevan a un nivel que no habían tenido".

"Las empresas tendrán que demostrar que vienen a construir con buena calidad, no a buscar atajos ni a litigar. China también nos debe abrir más puertas", concluyó.