Cerca de 45 millones de coches autónomos podrán conectarse e intercambiar información a la vez en solo un minuto en 2022, mediante ancho de banda de interconexión privada, ha explicado este miércoles el director general de Equinix España, Ignacio Velilla.

Es una de las conclusiones que se extraen del Índice de Interconexión Global, un informe presentado en Madrid y realizado por Equinix, una compañía multinacional especializada en conexión a internet y centros de datos.

La interconexión es el intercambio de datos directo y mediante redes privadas entre dos empresas u organizaciones.

Que esa cifra de vehículos autónomos pueda intercambiar ese volumen de datos en solo un minuto es posible por el crecimiento anual del ancho de banda de la interconexión, que está por encima del 50 %, según ha destacado Velilla de entre las principales revelaciones del informe.

Este tipo de conexión "supera de largo" el crecimiento previsto para el internet u otras redes -como las MPLS-, ha dicho el responsable de Equinix en España.

"En un mundo en el que a día de hoy tenemos tantísimas aplicaciones en tiempo real" o en el que "todos vivimos con el móvil pegado", una estructura de datos que se basa en operadores de telecomunicaciones "no tiene sentido", ha explicado Velilla.

A su juicio, gracias a este tipo de conexión privada "existen 'hubs' internacionales donde los datos se reparten de forma proporcional" y "más fácilmente".

En lo que se refiere a las empresas, actualmente las grandes compañías localizan y distribuyen sus datos hasta en tres regiones distintas y, dentro de cada una de ellas, tienen de media tres centros a los que permanecen conectados, según el Índice.

Velilla considera que es fundamental la interconexión entre empresas, porque es "una realidad" que "ya nadie vive solo, aislado con su negocio".

En ese sentido, las grandes empresas tienden a conectarse entre ellas porque sus servicios dependen de terceros, ha añadido.

Por sectores y de cara a 2022, el crecimiento de este tipo de conexión aumentará de forma más acentuada, por orden, en la industria de las telecomunicaciones (19 %), la nube o el de las tecnologías de la información (16 %), banca y seguros (14 %) o el manufacturero (12 %).