Economía

"Somos unas sin techo", dicen dos afectadas por la quiebra de Thomas Cook

24 septiembre, 2019 15:30

Lejos de los fríos números que conlleva la quiebra del operador Thomas Cook, detrás de este fatídico desenlace para la compañía se encuentran incontables rostros de turistas que se ven afectados por una situación que ha alterado de forma drástica sus vacaciones y los ha convertido en "sin techo".

"Somos unas sin techo" es precisamente lo que han manifestado de forma insistente a Efe Sheila y Brigitte, dos británicas originarias de Bexhill-on-Sea, un poblado ubicado en el condado de Sussex Oriental, en el sureste de Inglaterra, y Swindon Wilts, en el condado de Wiltshire, que reclaman soluciones desde Aguadulce, en Roquetas de Mar (Almería).

Las afectadas muestran en su teléfono móvil el mensaje remitido por Thomas Cook en el que se informa del cese de toda la actividad y los enlaces para reubicaciones en vuelos, etc., desde la terraza del bar de Aguadulce en el que se encuentran desde el pasado 18 de septiembre.

Las británicas, que aseguran no haber tenido ningún problema hasta la comunicación de Thomas Cook y tienen previsto su regreso a casa para mañana, subrayan que pagaron a este touoperador más de 700 euros por su estancia en este rincón del sudeste español.

En el caso de Brigitte ha elegido el destino España durante unos 15 años, pero junto a Sheila muestra ahora su reticencia a regresar ante una situación que las ha desbordado.

"Nos quieren cobrar doble, quieren que abonemos la misma cantidad que ya pagamos a Thomas Cook de forma previa", sostienen. Mientras, sin garantía de poder dormir siquiera en el mismo hotel en el que han pasado su tiempo en Almería, afirman que "seguramente" pasarán la noche en otro establecimiento hotelero aunque finalmente puedan pernoctar en el suyo.

Todo ello mientras almuerzan con su equipaje al lado de la mesa, ya que se han visto obligadas a abandonar su habitación, al menos por el momento.

Consideran que desde el hotel no se les ha dado una respuesta adecuada, aunque no culpan a los trabajadores. "No es culpa suya, ellos son recepcionistas y la central de la cadena está en otro sitio, sólo siguen órdenes", manifiestan en este sentido.

Especialmente Brigitte, abogada de profesión, lamenta la poca ayuda recibida desde las administraciones, reiterando continuamente que "los ingleses somos personas que ayudamos a otros cuando lo necesitan, nos hubiera gustado recibir el mismo trato".

También recalcan que han visitado este país "durante años y hubiéramos seguido haciendo lo mismo". "Ahora nos quedaremos en casa o tendremos que elegir otro destino", apostillan.

Algo que creen que ocurrirá también con otros británicos que se vean en su misma situación, por la supuesta falta de respuesta institucional y la petición de cobro que hacen las empresas con las que trabajaban Thomas Cook. En cualquier caso, reiteran que el gobierno británico ha recomendado a sus ciudadanos en el extranjero que no vuelvan a pagar la misma cantidad ya abonada.

"No sabemos qué vamos a hacer. Comeremos y buscaremos otro hotel y mañana regresaremos a casa", ese es el resumen de dos mujeres que a pesar de haber disfrutado durante años de la oferta turística del país, dudan que vayan a regresar en un futuro por haberse quedado "sin un techo".