Helsinki, 13 sep (EFECOM).- El miembro del Comité ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE) Benoît Coeuré consideró este viernes que "habría sido muy útil" que el presupuesto de la eurozona tuviera un carácter contracíclico, es decir, que permitiera actuar durante las crisis económicas.

"Esa característica contracíclica habría sido muy útil. No está ahí por decisión de los Estados miembros y eso, en cierto sentido, hace que sea incluso más importante que las políticas fiscales nacionales proporcionen el impulso contracíclico que se necesita ahora", declaró durante una rueda de prensa, posterior a la reunión de ministros de Economía y Finanzas de la eurozona (Eurogrupo) celebrada hoy en Helsinki.

En junio, los titulares económicos de la eurozona alcanzaron un acuerdo sobre las líneas generales del presupuesto que dejaba sin respuesta cuestiones esenciales, como el tamaño que tendrá y de dónde saldrán los fondos.

Los "términos de referencia" pactados especificaban que los países podrían usar fondos del presupuesto para financiar reformas estructurales o inversiones que tengan por objetivo mejorar la competitividad y la convergencia económica entre los países del euro.

Sin embargo, los socios de la eurozona no lograron acordar que el conocido como Instrumento Presupuestario para la Convergencia y la Competitividad (BICC, por sus siglas en inglés) tuviera un carácter contracíclico, si bien países como España lo exigen para respaldarlo.

"Hay una tercera "ce" que no tiene el BICC y es la de contracíclico. Nos habría gustado un BICCC con tres "ces" en vez de un BICC con dos "ces"", admitió Coeuré.

El economista francés respondió de ese modo a la pregunta de si el presupuesto de la eurozona responde a las preocupaciones del BCE sobre política fiscal, después de que el presidente de esa institución, Mario Draghi, hiciera un llamamiento este jueves a algunos gobiernos de la zona del euro para que apliquen las políticas fiscales adecuadas para estimular la economía.

"Parcialmente sí", constató, y agregó que si puede ayudar a la convergencia, también ayudará a transmitir la política monetaria y, por tanto, apoyará la labor del Banco Central Europeo.

En cualquier caso, echó en falta la función contracíclica.

Durante el Eurogrupo de hoy, los ministros de toda la Unión Europea intentaron avanzar en las cuestiones pendientes del presupuesto del euro, como el modo en que se financiará, que los titulares económicos pretenden cerrar durante su reunión de octubre en Luxemburgo.

El presidente del Eurogrupo, Mário Centeno, recordó que los líderes de la UE pidieron en la cumbre de junio a los ministros seguir trabajando en asuntos pendientes como la financiación, y pidieron ser informados "rápidamente" sobre "soluciones apropiadas".

"Rápidamente significa en octubre, con vistas a integrar el debate más amplio en el próximo presupuesto (plurianual) de la UE" para el período 2021-2027, constató el portugués.

Aunque los ministros acordaron en junio que la herramienta para la eurozona se enmarcará dentro del presupuesto plurianual para 2021-2027 de la UE, no se aclaró si esa dotación podrá complementarse después con aportaciones adicionales de los socios de la eurozona. Para ello, sería necesario un acuerdo intergubernamental entre los países de la moneda común.

Sobre los asuntos pendientes, Centeno expresó que se pretende lograr un marco de gobernanza de la eurozona para el presupuesto vinculado al Semestre Europeo, las normas europeas de disciplina presupuestaria y la coordinación económica.

En cuanto a la financiación, reconoció la división existente entre quienes consideran suficientes los recursos obtenidos del presupuesto plurianual y quienes prefieren añadir fondos adicionales mediante un acuerdo intergubernamental.

Centeno apuntó que se necesitará introducir una cláusula en la legislación del instrumento para "prever la posibilidad de esos ingresos adicionales".

El político reconoció que hoy hubo "amplio apoyo" entre los ministros para incluir esa cláusula, lo cual "no prejuzga" si finalmente se logrará un acuerdo intergubernamental que permita utilizar recursos adicionales.

En cuanto a la distribución de los fondos entre los Estados miembros, Centeno expuso que debe reflejar el tamaño e ingresos de cada país.

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