Madrid, 11 sep (EFECOM).- Merlin Properties y Colonial consideran que el brexit tendrá un efecto moderado en el sector de oficinas español en el corto plazo y apuntan a Ámsterdam, París y Fráncfort como las ciudades más beneficiadas ante la salida de empresas del Reino Unido en el caso de que abandone finalmente la Unión Europea.

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De hecho, Clemente estima que España podría aspirar a un 5 % de la cuota de mercado de las empresas que salieran del Reino Unido y considera que ciudades como Ámsterdam, París y Fráncfort, especialmente, serán las más beneficiadas, entre otros factores, porque tienen un PIB per cápita superior al de España y han adoptado incentivos fiscales.

En ese sentido, el consejero delegado de Colonial, Pere Viñolas, ha subrayado también que el beneficio que tendrá el brexit para el conjunto del sector inmobiliario español no será "especialmente relevante" en el corto plazo y ha apuntado a que no hay un diagnóstico claro sobre la salida del Reino Unido.

Viñolas ha coincidido también en que el impacto más inmediato se está observando en ciudades más cercanas a Londres, como París, y en algunas alemanas.

Tras intervenir en una jornada inmobiliaria, Clemente ha reconocido que el impacto de la incertidumbre política en España sobre el sector es relativo, mientras que Viñolas ha señalado que aunque actualmente no es muy relevante, "siempre es mejor un país con un marco estabilizado que con interrogantes pendientes".

Respecto a la evolución del sector inmobiliario, el consejero delegado de Merlin ha destacado que el segmento de oficinas sigue al alza en Madrid y Barcelona, donde hay fuertes tensiones en los precios.

En el caso de la logística, ha apuntado que también está evolucionando bien aunque las rentas no están creciendo de forma exponencial, en tanto que en el sector de centros comerciales la afluencia de clientes "está plana" ante el auge del comercio "online" pero hay esperanza si no hay grandes novedades en la situación macroeconómica.

Por lo que respecta a Colonial, su consejero delegado ha indicado que el sector inmobiliario mantiene una vitalidad "envidiable" y un comportamiento muy bueno que, sin embargo, siempre se puede estropear.