La Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) ha acordado abrir la segunda fase en el proceso de autorización de la venta del negocio de cemento blando de Cemex a la turca Çimsa Çimento Sanayi Ve Ticaret por considerar que la operación puede obstaculizar el mantenimiento de la competencia.

Se inicia así un periodo de dos meses durante los cuales se analizarán en profundidad los posibles obstáculos al mantenimiento de la competencia efectiva en el mercado nacional de fabricación y venta de cemento blanco y en el mercado ascendente de clínker para la producción de cemento blanco.

El pasado 5 de julio, las empresas notificaron al supervisor la adquisición por parte de Çimsa Çimento Sanayi Ve Ticaret del negocio de cemento blanco de las sociedades Cemex España Operaciones, Cemex, S.A.B. de C.V. y Cemex España, excluyendo determinados activos.

Según informó Cemex en marzo, la operación, valorada en 156 millones de euros, no incluye el negocio de cemento blanco en México ni la inversión en Lehigh Cement en Estados Unidos.

Tras analizar la operación y consultar a diversos operadores, el análisis en primera fase permite concluir que la operación de concentración notificada "es susceptible de tener efectos sobre la competencia en el mercado de la fabricación y venta de cemento blanco, así como en el mercado ascendente de clínker para la producción de cemento blanco", según la CNMC.

En un comunicado, el organismo ha explicado este miércoles que los riesgos asociados a la operación son muy dispares según el ámbito geográfico considerado, por lo que se deberá determinar si se trata de un mercado de dimensión nacional o supranacional.

Además, en términos de concentración del mercado, "existen dudas razonables sobre los riesgos que puede entrañar la operación".

"Se trata de un mercado ya de por sí con pocos operadores, por lo que esta adquisición redundaría en un mayor poder de negociación de los fabricantes respecto a sus clientes, con el riesgo de que se produzca un incremento de precios como resultado de la operación", según la CNMC.

Por otra parte, el organismo considera necesario confirmar la dimensión geográfica relevante del mercado de fabricación y comercialización de clínker (utilizado en la producción de cemento blanco), en el que están presentes las partes, "con el fin de valorar adecuadamente el solapamiento vertical de la operación".

En el marco de la segunda fase, la CNMC publicará en su página web en los próximos días una nota sucinta dirigida a informar a las personas físicas o jurídicas que puedan resultar afectadas por esta concentración y al Consejo de Consumidores y Usuarios. Las alegaciones podrán presentarse en un plazo de 10 días.

En octubre del pasado año, Cemex anunció un proceso de reestructuración de su negocio en España que recogía el cese de actividad de las fábricas de Gádor (Almería) y Lloseta (Baleares), una reducción de su estructura y ajustes de personal en otros centros de trabajo, en las oficinas comerciales y en las corporativas centrales.

Como parte de este proceso, la cementera y los sindicatos llegaron a un acuerdo en el marco del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para 188 trabajadores en España.