Siemens Gamesa se desploma más del 13,8 %, la mayor caída del IBEX 35 y de la Bolsa española, tras presentar las cuentas de los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal, que reflejan que sólo en el tercer trimestre ganó el 53 % menos por costes de integración y reestructuración, y reportar menores márgenes.

Pasadas las 10:30 horas, las acciones de la compañía, que espera cumplir sus objetivos en 2019, se intercambiaban a 13,37 euros, frente a los 15,52 euros de la víspera.

No obstante, en lo que va de sesión los títulos, que han sido inhibidos varias veces a lo largo de la mañana, han llegado a desplomarse el 14,2 %, hasta los 13,31 euros.

Con todo ello, las acciones se dejan un 13 % de su valor en la semana y más de un 8 % en el mes, aunque desde comienzos de año se han revalorizado un 26 %.

En el conjunto de los nueve primeros meses de su ejercicio (octubre a junio), Siemens Gamesa obtuvo un beneficio neto de 88 millones, el doble que un año antes.

Las ventas del grupo ascendieron a 7.283 millones, el 12 % más, mientras que en el tercer trimestre aumentaron un 23 %.

Por su parte, el beneficio antes de intereses e impuestos, o ebit, antes de PPA -acuerdo de compraventa de energía-, costes de reestructuración y de integración, fue de 159 millones en el segundo trimestre fiscal, un 1,9 % más.

Los analistas esperaban un beneficio neto de 39 millones y un ebit antes de PPA, costes de reestructuración y de integración de 168 millones, según las estimaciones recogidas por la compañía.

El margen de ebit antes de PPA, reestructuración e integración se redujo en el trimestre un 6,1 % desde el 7,3 % del ejercicio anterior y frente a unas expectativas de los analistas del 6,7 %, según recoge Efe Dow Jones.

Según ha destacado Renta 4, el margen se ha visto afectado por la reducción de los precios y por costes adicionales de ejecución en el segmento terrestre en el norte de Europa e India.

En el comunicado, la compañía explicó que el margen también se vio lastrado por un incremento de los precios de importación de componentes chinos a Estados Unidos y la volatilidad del mercado en diferentes países.

En una conferencia con analistas el consejero delegado, Markus Tacke, ha señalado que los problemas de ejecución en el norte de Europa están relacionados con complicaciones logísticas en la región y que no pasarían al cuarto trimestre.