Sacyr logró un beneficio neto de 80,5 millones de euros entre enero y junio de 2019, el 11 % más que un año antes, según el grupo, que atribuyó la mejora de sus resultados al éxito de su apuesta por la rentabilidad, la disciplina financiera y la consolidación en sus mercados estratégicos.

Los ingresos repuntaron el 11,4 %, hasta 2.009 millones, y el resultado bruto de explotación (ebitda) subió el 32 %, hasta 315 millones de euros, de los que el 77 % procedió de activos concesionales con bajo riesgo de demanda.

Por negocios, Sacyr Concesiones aumentó su facturación el 36 % (444,6 millones), apoyado en el incremento de los ingresos de construcción (64 %) y concesiones (19 %). El resultado bruto de explotación subió el 17 % (151 millones).

La cifra de negocio de Sacyr Ingeniería e Infraestructuras aumentó el 19 % (958,7 millones) y su ebitda el 70 % (104 millones), según las cuentas remitidas este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Sacyr Servicios incrementó sus ingresos el 4 % (550 millones), debido a la entrada en operación de nuevos proyectos en cartera, y los de Sacyr Industrial decrecieron el 17 % (216 millones) por la finalización de grandes contratos.

En paralelo, el grupo continuó con su estrategia de rotación de activos y durante el primer semestre vendió su participación en Itínere por 202 millones de euros y el 49 % de su participación en siete activos chilenos por 440 millones (incluida deuda).

Según la misma fuente, Sacyr elevó su flujo de caja operativo el 44 %, hasta 183 millones de euros, y cerró el semestre con una cartera valorada en 42.642 millones de euros, de los que el 73 % son internacionales.