Economía

Las telecos piden el apoyo del Gobierno para impulsar la revolución digital

16 julio, 2019 12:56

Representantes de algunas de las mayores empresas tecnológicas y de telecomunicaciones han coincidido en pedir este martes el apoyo del Gobierno para impulsar la revolución digital y lograr que España no se quede atrás en la transformación tecnológica.

"No podemos dejar pasar esta oportunidad. Sería como si hubiéramos dejado pasar la revolución industrial teniendo las líneas férreas", ha resumido el presidente de Telefónica España, Emilio Gayo, durante el segundo congreso anual de la patronal de las empresas de telecomunicaciones DigitalES en Madrid.

Gayo se refería así a la afirmación previa del presidente de la patronal, Eduardo Serra Rexach, de que España perdió en su día la revolución industrial, y ha añadido que volver a perder un hito histórico de tal magnitud sería "aún más grave" porque el país ya cuenta con "las líneas férreas" de esta revolución (las redes de telecomunicaciones).

"Necesitamos una regulación que haga sostenible este sector para poder dar este imprescindible salto digital", ha defendido Gayo.

Ha insistido en que "los viejos modelos, a lo mejor no valen para los nuevos momentos" para así poner en duda el sistema actual de subastas que reparte el espectro radioeléctrico y defender que el sector ha de ser "sostenible" si se quiere que hiperconetividad del 5G llegue a la sociedad.

De la misma opinión se ha mostrado Ignacio Gallego, presidente de Nokia España, quien ha defendido que la transformación digital supone "un reto colectivo en el que la Administración tiene mucho que aportar".

Por el momento, "claramente no está siendo suficiente", ha añadido, ya que España, que está entre las 15 mayores economías del mundo, ocupa el puesto 35 en la clasificación digital.

"La transformación digital no es sólo hacer las cosas mejor o más barato, sino distinto: digitalizando el negocio para cambiarlo y encontrar nuevas maneras de hacer negocios, nuevos clientes y nuevos mercados", ha declarado Gallego, convencido de que "meter tecnología en la empresa no da necesariamente más capacidad de competir".

La Administración, en su opinión, debe ayudar también favoreciendo la creación de ecosistemas con múltiples desarrolladores trabajando juntos, ya que "el 'yo me lo guiso yo me lo como' empieza a dejar de tener sentido".

"La Administración seguro que también puede hacer más dotando de más fondos para acompañar a la inversión de las empresas", que son las que se están encargado de "democratizar la tecnología", y aportando "normas que no dificulten la inversión", ha opinado.

Para Marta Martínez, presidenta de IBM para España, Portugal, Grecia e Israel, los Gobiernos deben también entender, igual que las empresas, que es fundamental invertir en investigación, innovación y desarrollo y hacerlo "de una manera sostenida".

"La colaboración público-privada es fundamental" ha declarado la responsable de IBM, precisamente en un día en que se cumplen 50 años del despegue del Apolo 11, dotado de tecnología de esta empresa centenaria, para acometer una misión que no hubiera sido posible sin esa combinación de recursos públicos y privados.

La cuestión de la seguridad, la ética y la privacidad son "más importantes que nunca" con las nuevas tecnologías, según Martínez, por lo que según ella los gobiernos tienen que "fomentar y regular las normas de conducta".

José Antonio López, presidente y consejero delegado de Ericsson España, ha defendido que, además de aportar "líderes con visión", el mundo empresarial ha de "lograr el apoyo público-privado, porque el retorno a corto plazo (de las inversiones necesarias para impulsar el 5G y la transformación digital) no va a estar ahí".

Víctor del Pozo, consejero delegado de El Corte Inglés, ha insistido igualmente en la importancia de "invertir en las personas" que no están relacionadas con la tecnología, algo que en su opinión no se está haciendo y que podría echar por tierra los esfuerzos de las empresas por ofrecer a la ciudadanía ventajas concretas que trae la digitalización, que "ha llegado para quedarse".