El Gobierno italiano revocará ayudas al fabricante de electrodomésticos estadounidense Whirlpool que pueden ascender hasta 15 millones de euros, después de que haya decidido cerrar una planta en Nápoles (sur).

"Hoy firmaré una directiva ministerial que eliminará los incentivos para Whirlpool por 15 millones de euros, porque debemos hacernos respetar", afirmó hoy el vicepresidente del Gobierno italiano y líder del Movimiento Cinco Estrellas, Luigi Di Maio, en una entrevista con la radio Rtl 102.5.

El también ministro de Desarrollo Económico y Trabajo argumentó que las empresas no pueden beneficiarse de las ayudas estatales si luego no cumplen con lo acordado y confió en que esta medida haga cambiar de opinión a los directivos de la empresa, con quienes se reunirá mañana.

"Whirlpool dice que quiere cerrar una planta en Nápoles. Veremos si vienen (a la reunión) más calmados", apuntó, y destacó que desde 2014 Whirlpool se ha beneficiado de más de 50 millones de euros en incentivos por parte de Italia.

La decisión del ministro ha sido aplaudida por los sindicatos y el secretario general de la Unione Italiana del Lavoro (Unión italiana del empleo), Carmelo Barbagallo, confió en que sea "un factor disuasorio" para que de marcha atrás.