Brasken, una de las diez mayores compañías petroquímicas del mundo, informó este martes de que su matriz Odebrecht no ha conseguido un acuerdo con el grupo holandés LyondellBasell para venderle su participación en la empresa brasileña.

Los expertos consideran que la holandesa dio un paso atrás por la situación financiera que sufre actualmente el grupo Odebrecht, aunque Brasken no especifica en un comunicado publicado este martes los motivos que frustraron las negociaciones empezadas hace un año, y tampoco lo hace LyondellBasell en su nota. 

Odebrecht es el principal socio de Brasken con el 50,1 % de las acciones con derecho a voto, aunque buena parte están empeñadas como garantía en diferentes bancos, entre ellos Bradesco, Itaú y Santander.

El segundo socio mayoritario es la estatal petrolera Petrobras, con el 47 % del capital con derecho a voto.

La constructora esperaba vender su participación a la compañía holandesa para reducir la deuda millonaria del grupo Odebrecht por la crisis que sufrió tras destaparse sus corruptelas con la estatal Petrobras, reveladas en la mayor operación anticorrupción en la historia de Brasil.

La brasileña Atvos, segunda mayor productora de etanol en Brasil y filial del grupo Odebrecht, se acogió la semana pasada a la ley de quiebras para "preservar sus operaciones" y "garantizar su equilibrio financiero", ya que acumula deudas de 12.000 millones de reales (unos 3.020 millones de dólares).

El grupo Odebrecht se encuentra en transformación después de convertirse en el epicentro de un escándalo de corrupción de dimensión internacional debido a las malas prácticas de su constructora, otro de sus negocios.

Odebrecht, ahora llamada OEC, protagonizó, junto con otras 15 constructoras brasileñas, el mayor escándalo de corrupción en la historia del país al participar en una red que desvió millonarios fondos de la estatal Petrobras, por medio de licitaciones fraudulentas y contratos inflados.